Un grupo de empresarios tiene tantas ganas de que ya se vaya Miguel Ángel Yunes de Veracruz que planean festejarlo como si fuera Año Nuevo. Aunque todavía les quedan como 100 días, se tomaron en serio la consigna y ya empezaron con los preparativos. Este martes, los empresarios instalaron un reloj gigante que cuenta hasta los segundos que quedan para despedir al actual gobernador.

Un punto importante: para este grupo de empresarios no se trata de que Yunes les caiga mal. En realidad, este festejo por su salida se debe a que el gobierno veracruzano les debe millones de pesos en contratos no pagados. 

Por ejemplo, Alejandro Cossío le decía a Proceso que la administración de Yunes le debe 52 millones de pesos por la operación de siete clínicas de hemodiálisis.

¿Y qué pasará con el reloj?

De acuerdo al grupo de empresarios, si Yunes Linares paga, el reloj será retirado sin ningún problema. Eso sí, de otra manera el reloj se quedará ahí hasta que le canten las golondrinas al gobernador porque se encargaron de sacar todos los permisos necesarios con el ayuntamiento de la capital de Veracruz.

Los encargados de la instalación le decían al semanario que están pagando 900 pesos diarios por la renta del reloj gigante. Mientras, la cosa sigue estancada: “Ayer incluso del gobierno me mandaron decir que si quitaba el reloj me pagarían; yo con gusto lo quito si me pagan, hasta le hacemos valla de despedida”, decía Cossío, accionista de la empresa Imhotep.

El 30 de noviembre será el último día de la administración del PAN-PRD y técnicamente, también su fecha límite de pago. Si las cosas no salen bien, los empresarios ya anunciaron que tienen un fiestón preparado: “Se hará con tamales, pambazos y atole en esta plaza. Hasta cohetes vamos a aventar”.

*Con información de Proceso y @Terania_R

Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com

Comentarios

Comenta con tu cuenta de Facebook