Y en lo que nos peleamos por la consulta y unos “dicen” que van a poner bien abiertos los ojos para checar lo que hace la futura administración… por acá se andan librando los meros, meros. Ahora el que da la nota es Tomás Yarrington.
El exgobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington, obtuvo un amparo que dejará sin efecto cualquier orden de aprehensión que se llegue a pronunciar para apañarlo por el delito de lavado de dinero. Con la aclaración de si se trata de un delito continuado o si éste ya fue prescrito.
De acuerdo con El Universal, el encargado de conceder tal amparo a Yarrington fue un juez federal Décimo Tercero de Distrito de Amparo en Materia Penal de la Ciudad de México. Éste ordeno a su colega del Estado de México dejar sin efecto la tan mencionada orden girada contra el exmantadario por su probable responsabilidad en el delito de lavado.
Lo anterior, para suerte de los oídos de la jefecita de EPN y cualquier otro a quien se le pueda achacar lo flexible de la justicia que se ejerce contra probables saqueadores del erario, no significa que Yarrington ya la libró y podrá quedar en libertad… per otro poco. Suerte, otra vez, que contra él existen diversas acusaciones por diferentes delitos, así que tardará un poco en ir quitándose tanta mugre de encima.
¿Cómo cuáles? Bueno, por ejemplo, se le acusa de violar las disposiciones del estatuto de chantaje civil, influencia y organización corrupta, así como para lavar dinero, cometer fraude y hacer declaraciones falsas a los bancos de ese país con garantía federal, etcétera… un total de 11 cargos que le fueron cantados en abril pasado, cuando compareció ante la corte federal del sur de Texas, luego de ser extraditado de Italia a Estados Unidos.
Con ese CV delictivo no fue sorpresa que el juez Ronald G. Morgan le negó el beneficio de una fianza, por lo que el ex gobernador permanecerá en prisión durante un buen rato.