Puede que esté delgada, pero a una taquería sería altamente costoso llevar a esta mujer.
Molly Schuyler no necesitó tener un físico voluminoso, una barba llamativa, ser trailera o tener un apodo extravagante para engullir en menos de tres minutos un filete de dos kilos, con lo que logró imponer un nuevo récord mundial.
La delgada madre de cuatro hijos se instaló en un restaurante de Portland, Oregon y devoró la indefensa carne sólo acompañada de un vasito de chesco y otro de agua.
“Es un fenómeno inexplicable, yo sólo nací de esta manera (…) Supongo que es como un truco estúpido humano”, confesó a la KPTV.
Efectivamente un fenómeno… y si tienen estómago pueden checar otra proeza de esta dama, que en otra ocasión se empacó 4 kilos de queso cottage en dos minutos.