Para matar el tiempo mientras el tanque de gasolina del coche se llena, se pueden hacer infinidad de cosas; hay quienes optan por los simples placeres de sacarse los mocos, rascarse, intercambiar algunas palabras con el copiloto, revisarse la cara en el retrovisor, limpiar los lentes, gran número de actividades para evitar el aburrimiento.
Pero a un tipo de Melbourne, EU, lo único que se le ocurrió hacer en esos minutos fue chasquear su encendedor. Una opción bastante torpe, pues la chispa que produjo alcanzó el combustible que brotaba de la bomba, aunque todo ocurrió en un segundo, la estupidez de este sujeto quedó registrada por las cámaras de seguridad de la estación de gasolina.
Todo este cuento no tendría el mismo final si no hubiera sido por el buen transeúnte que iba pasando por ahí y se acercó con una cubeta de agua para apagar el fuego.
¿Ustedes harían lo mismo por el prójimo?
