El contacto del hombre con la naturaleza se ha perdido a lo largo del tiempo, pero hay quienes intentan recuperarlo y más si se trata de ver de cerca a animales salvajes. Vemos que la gente tiene en su casa, malamente, especies que no son domésticas o que hacen viajes para conocer y convivir que las especies más temidas del mundo.
Una forma sencilla de estar cerca de estas especies es el buceo. Sumergirse en las profundidades, dar un paseo por un mundo desconocido y tener de cerca a un tiburón, puede ser el sueño de cualquier amante de la adrenalina. Justo esto le pasó a un guía que se aventuró al fondo del mar.
Protegido con su traje de neopreno, su visor y su tanque de oxigeno, Dave Marcel dio el paseo habitual a los turistas que se dieron cita para conocer al tiburón “Gato” el cual pesa poco más de 150 kilos y suele ser bastante inofensivo con la gente, aunque ahí comenzó el problema para el buzo.
Lucirse ante la gente posiblemente redituaría en una propina más grande y por qué no, arriesgarse un poco de más era la clave. Fue así que Dave decidió hacer algo que seguramente sabía que no estaba del todo bien, tomó al animal y acercó su cara lentamente para ¿besarle? y pagó las consecuencias.
Esto lo hizo acreedor a salir en el programa llamado “Semana del tiburón” en Discovery Channel. Fue ahí donde conocimos a este hombre que desde hace tiempo tenía una relación bastante cercana con la especie, aunque sus compañeros le decía que tuviera cuidado, porque no sabía cómo podía reaccionar en algún momento.
Esto es lo que pasa cuando la confianza que tiene el hombre hacia el trato con especies salvajes se confunde y termina en una tragedia. Los animales basan su vida en el instinto y ése tiburón no hizo más que actuar como le pareció pertinente, lo cual no hizo el buzo.
Si alguien lo conoce, preséntele una chica, parece que está urgido por besar a lo que sea.