Y ahora, una nota de esas que sólo pasan en México, o en Los Simpson.
Resulta que el pasado 7 de agosto se registró un operativo en la colonia Country Club, en Coyoacán, Distrito Federal. Se detuvo a dos colombianos, a un israelí, hubo balacera, un delincuente muerto y toda la cosa. Se decomisaron 40 paquetes ‘de cocaína’ y la Procuraduría General de la República (PGR) inició una investigación para deslindar respobsabilidades.
Hasta aquí ‘todo iba normal para ser México’, pero entonces se descubrió que los paquetes confiscados en realidad tenían… detergente. Esto de acuerdo a los exámenes periciales que le fueron practicados al cargamento decomisado.
Ahora, las autoridades no saben si en realidad nunca existió la supuesta droga, o si hubo chancullo y en algún momento se cambió el contenido de los paquetes. Para aclarar la situación, ya se ordenó una indagatoria a los miembros de la Policía Federal Ministerial que estuvieron en el operativo, y que estaban a cargo de Arturo García Cavazos, director de Despliegue Regional.
En el operativo también participó la Policía Federal, pero sólo para apoyar perimetralmente a los agentes del Ministerio Público, y el Servicio Médico Forense, que se encargó de recoger el cuerpo del delincuente abatido.
Tampoco se descarta la teoría de que el cargamento no contenía cocaína, sino un químico que se emplea en la fabricación de drogas sintéticas. Entonces, ¿dónde quedó la coquita bolita?
Lo único cierto, es que por un buen rato, los Federales y Agentes Ministeriales traerán bien limpios los uniformes.