Este sábado, el París Saint Germain y Barcelona disputaron un partido amistoso de pretemporada, mismo que terminó empatado a dos goles.
Sin embargo, la historia del día, no fueron los goles de Messi, ni el planteamiento de Tito Vilanova, sino la generosidad de Zlatan Ibrahímovic que tan pronto llegó al estadio, corrió al vestuario del Barcelona, para saludar a su gran amigo Gerad Piqué…
¿Qué pie de foto le pondrían a esta conmovedora imagen?
¿Qué estarían pensando los jugadores del Barca, que observan en el fondo?