El pasado fin de semana, durante un acto promocional en Brasil, Roger Federer nos demostró que a pesar de ser uno de los mejores tenistas de todos los tiempos, también es un hombre común y corriente, que incluso realiza actividades tan humanas como echarse un buen taco de ojo.
Y es que en dicho evento, Roger Federer, todo un caballero en las canchas, no pudo evitar sucumbir ante las poderosas piernas de Maria Sharapova, quien hizo acto de presencia con una mini falda que cautivó a los presentes.
Roger dirá que se estaba acomodando en su lugar, pero pues la verdad, ninguno de nosotros podemos culparlo por lo que hizo.
“A decir verdad, estoy un poco nervioso, pero animado”, comentó durante el evento.
Yo también estaría bien animado.
(Ahora tiene sentido eso de que la torta rusa tiene quesillo, milanesa… y pierna).
¿Y ustedes, qué título le pondrían a esta imagen?