En Suwon, Corea del Sur, cuenta la leyenda que el exalcalde de esa ciudad, un hombre llamado Sim Jae-duck, nació en el baño de su abuela y desde entonces, tuvo una fascinación por esta habitación que todos la usamos de “pisa y corre”. Bueno… de hecho, su casa, hoy museo, tiene forma de W.C.
Resulta que esta obsesión por esta habitación “donde el rey va solo” llegó a tales dimensiones que, el lugar donde se encontraba la fortaleza de Hwaseong, ya no es atracción para los turistas y sí lo es el “Parque Cultural del Baño”.
WTF?!?!
Este “parque” ya se encuentra abierto para todo el público y su razón de ser (además del fetiche de Sim-Jae duck) es lo que dijo la vocera de este lugar:
¿Qué es lo primero que hacemos en la mañana cuando despertamos? Vamos al baño. Pero la gente pareciera no querer hablar de eso. El baño no es solo el baño como lo conocemos, puede ser también un espacio cultural
Si lo dijo por las revistas o periódicos que nos llegamos a llevar al baño para “hacer que la cosa fluya”, pues… puede ser.
Lo que es muuuy cierto es que en el Parque Cultural del Baño se pueden apreciar una serie de figuras de bronce en pose de “aguilita” y quienes más frecuentan el lugar son los niños menores de cinco años, obviamente acompañados de sus padres.
Pose típica para tomarse una foto en el Parque Cultural del Baño
¿Qué les parece?
