Para que sigan finos en los disparos y, como en Michoacán sean los otros los que se maten entre sí, la policía de Cuautitlán, Estado de México, practica su puntería… sólo que a falta de blancos pues tienen que utilizar figuritas… no de patitos, ni nada parecido, sino arqueológicas.
Pues como vieron que nomás estaban arrumbadas en una bodega propiedad de Homex, los polis decidieron usar las piezas pertenecientes a la cultura tolteca a modo de latas de refresco… para mala fortuna de la historia de nuestra cultura, al parecer estos guardianes del orden sí tenían buena puntería:
“Lamentablemente, y cuentan ahí algunas versiones, que los que estaban ahí cuidando, los policías, jugaban al tiro al blanco con las piezas prehispánicas”, informó el alcalde de Cuautitlán, Gabriel Casillas Zanatta, quien aseguró que los policías ya están siendo investigados por el daño hecho a los vestigios.
La razón por la que los restos arqueológicos se encontraban en la bodega ubicada junto al rancho El Terremoto en la unidad Joyas de Cuautitlán era porque –hasta 2008- el lugar fue un laboratorio del Centro INAH del Estado de México. Sin embargo, la administración anterior negó el acceso al personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia y en lugar de permitir que se siguiera analizando a los vestigios, autorizó que el predio se utilizara como campo de tiro… esto según Casillas Zanatta.
El alcalde no pudo dar más información sobre el asunto, ya que aunque ya se abrió una investigación por saqueo y destrucción de las piezas arqueológicas, las autoridades municipales no pueden meterse, ya que es asunto de la PGR.