Y todo por no estar bien enterado de los derechos migratorios de su esposa…
Un sexagenario francés fue detenido en la estación ferroviaria de Terespol (en la frontera con Bielorrusia) por llevar fayuca a su país natal… bueno, por la forma en que el sujeto transportaba a su esposa, no es tan errado llamar así al inusual paquete.
El caso es que causó mucha extrañeza al personal de la guardia fronteriza polaca el ver que el hombre –cuya identidad no fue revelada- transportara una maleta tan voluminosa… y más extraño fue que al abrir la valija saliera una mujer de aproximadamente 30 años. “Es mi esposa”, declaró el sujeto a los guardias.
“Era la esposa rusa del propietario de la maleta. Se encontraba bien y no requirió cuidados médicos”, contó a los medios Dariusz Sienicki, portavoz de la seguridad del puesto ferroviario.
Ya que la mujer tenía derecho a ingresar a territorio europeo sin ningún problema, la pareja sólo fue interrogada y después fue puesta en libertad… pero luego del penoso incidente prefirieron regresarse a Bielorrusia.
El matrimonio salió de Moscú y su destino era Niza (no Neza) ciudad que se encuentra al sureste de Francia, pero el hombre de 60 años ignoraba que su mujer podía entrar legalmente con él… y como seguramente le es difícil encontrar otra mujer de la mitad de su edad que quiera casarse con él, pues de ahí su decisión de llevársela a modo de recuerdo.
“Si hubiese viajado sentada al lado de su esposo, habría pasado sin problema. Pero por tratar de evitar el control fronterizo, los dos podían haber sido condenados a una pena de tres años de cárcel”, comentó Sienicki.
*Vía RT, Reforma