Cada vez son más los sitios a los que llega la tecnología inalámbrica: plazas, parques, autos y ahora… animales.
Al menos así sucede en el parque temático Kfar Kedem en Israel, un lugar que intenta recrear toda la experiencia de los tiempos bíblicos. Debido a que el sitio no cuenta con antenas, los dueños idearon una forma de proporcionar WiFi a sus visitantes sin afectar la “magia” del lugar. ¿Cómo? Equipando a sus burros con routers inalámbricos y así transformarlos en hotspots móviles.
Gracias a esto, los turistas podrán tomar fotografías y compartirlas en sus redes sociales favoritas, mientras disfrutan de un recorrido por el Israel del viejo testamento. Eso sí, por ahora sólo 5 de los 30 burros del parque cuenta con esta tecnología, aunque de acuerdo con el gerente del lugar, ya se tiene planeado habilitar más de estos hotspots equinos.