Una investigación publicada por el New York Times, reveló que las constructoras alemanas de automóviles financiaron un estudio en humanos y monos para probar qué tan dañino es el Diesel.

 

Volkswagen llegó a pagar más de 26 mil millones de dólares en multas por los escándalos de emisiones de hace algunos años. Ahora, BMW y Daimler —fabricante de Mercedes— se unen a los fabricantes del vochito en la infamia ambiental y ética tras este estudio que, además, se menciona en los documentales de Netflix, “Dirty Money”.

Ahora, hablemos del estudio. De acuerdo a El Mundo, “el procedimiento consistió en encerrar a diez monos. En una sala contigua estaba un Volkswagen Beetle con motor diésel en prueba. Los gases se liberaban y los animales respiraban los vapores”. En la investigación con personas, 19 hombres y seis mujeres se expusieron a diferentes concentraciones de emisiones por varias horas, después los llevaron al hospital para revisar sus efectos en la salud.

 

¿Para qué? Según los reportes publicados, los constructores de autos querían probar que las emisiones de Diesel no son tan cancerígenas como lo dijo la Organización Mundial de la Salud.

Aparentemente, los estudios fueron comisionados por el Grupo Europeo de Investigación en Medio Ambiente y Salud en el Sector de Transporte (EUGT) un grupo privado de investigación que se disolvió el año pasado. De acuerdo a Reuters, la EUGT recibió fondos de las constructoras alemanas para realizar los estudios. Eso sí, Volkswagen ya dijo que el proyecto no estaba terminado cuando disolvieron la investigación.

Ahora que estos experimentos ya salieron a la luz pública, las cabezas de las armadoras empezaron a caer. Thomas Steg, director de Relaciones Exteriores en Volkswagen ya dejó la compañía. Además, dijo que “tomaba la completa responsabilidad de lo sucedido”

Eso sí, no todos hicieron lo mismo: Daimler ya declaró que “se deslindan totalmente del estudio” y que “contradice sus valores y principios.”


Esta información, representa más leña al fuego de la controversia entre fabricantes de automóviles y sus políticas ambientales y éticas.

*Foto de Portada: Thomas Steg, director de Relaciones Exteriores de VW. Crédito: AP

 

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Soy Max Carranza y me he pasado la vida rodeado de memes, cultura digital y bastantes horas frente a las pantallas. En el camino me encontré la pasión por abordar los temas sociales más urgentes e intentar...

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