Hace unos días, durante una marcha antiaborto en la Ciudad de México, le hicieron un ultrasonido a una adolescente embarazada de 15 años frente a la multitud. De acuerdo con los organizadores, esto demuestra lo importante que salvar una vida desde el momento de su concepción.
El asunto aquí es: Ana tiene 15 años, en ese momento tenía 38 semanas de embarazo y le hicieron un ultrasonido frente a cientos de personas… Hablemos entonces de embarazo en menores de edad.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) la adolescencia es la etapa que ocurre entre los 10 y 19 años, antes de esa edad los y las menores se califican como infantes.
Cifras de esta organización internacional revelan que a pesar de que desde 1990 hubo un descenso considerable de embarazos en adolescentes, a la fecha se calcula que el 11% de todos los nacimientos en el mundo son de mujeres entre 15 y 19 años, el 95% en países de ingresos bajos y medios.
Hasta 2014, las Estadísticas Sanitarias Mundiales mostraron que la tasa media de natalidad mundial entre las adolescentes de 15 a 19 años era de 49 por cada mil mujeres.
¿Y en América? El Fondo de Población de las Naciones Unidas de la ONU (UNFPA) revela que América Latina y el Caribe es la segunda región con la tasa más alta de embarazos adolescentes del mundo, estimando que casi el 18% de todos los nacimientos en la región son de mujeres menores de 20 años.
En este mismo sentido, la mortalidad materna en esta región está entre las primeras tres causas de muerte en mujeres de entre 15 y 19 años. Ser madre para una menor de 15 años trae consigo el riesgo de morir por causas relacionadas con el embarazo hasta tres veces mayor que en mujeres de 20 años.
Y en México la situación no es mucho mejor.
Embarazo en menores de edad en México
De los 36 países integrantes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México ocupa el primer lugar en embarazo adolescente con una tasa de fecundidad de 77 nacimientos por cada mil adolescentes —entre 15 y 19 años—.
Pero las cifras no se quedan ahí. El Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES) revela que en nuestro país el 23% de las y los adolescentes inician con su vida sexual entre los 12 y 19 años. De ese total, el 33% de las mujeres no usa ningún método anticonceptivo en su primera relación sexual, frente al 11% en hombres.
Cada año, aproximadamente, se registran 340 mil nacimientos en menores de 19 años.
Todos los días nacen más de mil bebés de niñas y adolescentes, de acuerdo con el Consejo Nacional de Población (Conapo). Solo el año pasado, en 2020, se registraron 373 mil 661 nacimientos de madres menores de 18 años, de los cuales 8 mil 876 son de niñas de entre 12 y 14 años.
En este mismo sentido, el Registro Nacional de Población (Renapo) señala que en nuestro país, 4 de cada 100 nacimientos son de menores de 17 años y la sexta causa de muerte en este grupo de población son complicaciones en el embarazo, parto o puerperio.
El asunto es que, todos los años, la UNFPA estima que cada año ocurren alrededor de 10 mil embarazos en niñas menores de 15 años que se relacionan con abuso sexual y violencia.
Para dimensionar cuántos embarazos en adolescentes y niñas se han registrado en México en los últimos 10 años, le vamos a echar un ojo a los datos de natalidad del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), registro basado en actas de nacimiento.
2010 a 2020
Los datos de natalidad del INEGI revelan que en 2010, por ejemplo, los nacimientos en menores de 15 años fueron el 0.4% del total y los nacimientos en adolescentes de 15 a 19 años fueron el 17.5%.
Dos años después, en el 2015, los nacimientos en menores de 15 años fueron el 0.43% y en adolescentes de 15 a 19 años fueron el 17.2%. Ya en 2020 los nacimientos en menores de 15 años fueron el 0.3% y los de madres de 15 a 19 años representaron el 14.2% del total de los registrados en el año.
Sin embargo, aún hay datos de los que tenemos que hablar. El año pasado se registraron 88 nacimientos en niñas de 10 años, 100 en niñas de 11 años, 167 nacimientos en niñas de 12 años, así como 3 mil 891 en niñas de 14 años.
En este decenio, de 2010 a 2020, en México se registraron 2 mil 391 nacimientos en niñas de 10 años y solo estamos contando aquellos registrados.
Abuso y violencia sexual
De acuerdo con el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas, los embarazos de niñas entre 10 y 14 años en su mayoría son responsabilidad de un amigo, familiar, un desconocido e incluso algún exnovio. Casi todos por violación sexual o matrimonios arreglados.
La subsecretaria del INMUJERES, Patricia Estela Uribe Zúñiga, afirmó que el embarazo adolescente y la violencia sexual son problemáticas que deben ser atendidas desde múltiples perspectivas y en distintos niveles.
Sabemos que, en este contexto, las niñas y adolescentes indígenas se encuentran en condiciones de mayor vulnerabilidad lo cual, a su vez, les impide ejercer sus derechos humanos.
El registro del INEGI revela que la mayor cantidad de nacimientos de madres menores de 15 años, en 2020, está en el estado de Chiapas con 488 casos, seguido por Veracruz con 354 casos y Puebla con 343 nacimientos.
En el caso de nacimientos de madres de 15 a 19 años, el estado con una mayor incidencia es el Estado de México con 25 mil 283 casos, seguido por Puebla con 17 mil 315 nacimientos y Chiapas con 16 mil 242.
En el 2020 se registraron 5 mil 007 nacimientos de madres menores de 15 años y 231 mil 433 en adolescentes de 15 a 19 años. De esos totales, 319 y 4 mil 182 son niñas y adolescentes sin escolaridad, respectivamente.
¿Han aumentado los embarazos en niñas?
Vamos a analizar los registros de nacimiento del INEGI de los últimos cinco años. En este periodo los estados que registraron más nacimientos de madres de entre 10 y 15 años fueron Chiapas, Veracruz, Puebla y Estado de México. Chiapas es la entidad que ha estado a la cabeza desde 2015 y hasta 2020.
A nivel nacional así es como se ven los nacimientos en niñas de 10 a 15 años en los últimos 5 años sin contar el 2021.
Pero si tomamos en cuenta solo los estados con más casos, entonces la gráfica se ve así.
Podemos observar, por ejemplo, que en Chiapas se ha registrado un aumento de nacimientos en menores de 15 años a partir de 2017 y hasta 2019. A partir de ese año las cifras cayeron en 2020.
Ahora, si hablamos de nacimientos en adolescentes de 15 a 19 años, los estados que más casos registran en estos mismo 15 años son Chiapas, Jalisco, Veracruz y Puebla. A la cabeza Chiapas.
Si observamos los números a nivel nacional, la tendencia de los últimos cinco años se ve así.
¿Qué está haciendo México al respecto?
El Instituto Nacional de las Mujeres afirma que el embarazo en los adolescentes —porque no es un asunto que solo involucra a las mujeres— afecta de manera negativa la salud, la permanencia en la escuela, los ingresos presentes y futuros, así como el acceso a oportunidades recreativas, sociales y labores especializadas, así como de calidad y de desarrollo humano.
Esto además de que tener relaciones sexuales sin protección implica un riesgo permanente de una enfermedad de transmisión sexual.
En esta administración se inició con la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes (ENAPEA) que involucra a 16 dependencias del Gobierno Federal, así como organizaciones civiles, organismos internacionales y expertos del ámbito académico.
Sus objetivos son reducir a 0 los nacimientos en niñas de 10 a 14 años, así como reducir en 50% la tasa de fecundidad de las adolescentes de 15 a 19 años para el 2030.
Esta estrategia se basa en varios aspectos clave como educación inclusiva, integral y flexible; educación integral en sexualidad progresiva e inclusiva, un programa de oportunidades laborales apropiadas para la edad y capacidades, un entorno habitable para los menores y la detección temprana de la violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes.
Pero aún hay mucho camino por recorrer, sobre todo en zonas del país históricamente marginadas, y luchando contra el machismo e ideas que hablan de que el único objetivo de las mujeres es la reproducción, aun cuando se trata niñas o adolescentes.
