Sin comprender bien de qué va la caravana conocida como el “Viacrucis del Migrante”, Donald Trump llamó a los congresistas de su país a meterle pasión para endurecer las leyes migratorias de su país, las cuales -según lo que ve- son “débiles” e ideales para la entrada ilegal de personas a su territorio.
“Por ridículo que parezca, las leyes de nuestro país no nos permiten fácilmente regresar de donde vinieron a aquellos que cruzan nuestra frontera sur. Todo un gran desperdicio de procedimiento debe llevarse a cabo. México y Canadá tienen leyes de inmigración duras, mientras que las nuestras son una broma de Obama”, señaló el republicano ayer por la tarde, mientras veía como una amenazante masa de migrantes iba en dirección a la frontera México-Estados Unidos con -quizás- la intención de entrar a territorio gringo… y a ver cómo los regresan ¿¿??
Sí, lo que Trump seguramente veía por televisión es la caravana conocida como “El Viacrucis del Migrante”, el cual tiene como objetivo visibilizar y concientizar la violencia que personas de Centroamérica viven en sus países, la cual los obliga a migrar… sólo para encontrar en su búsqueda de un mejor futuro, discriminación, violación a sus derechos humanos y, en muchos de los casos, la muerte. “Nosotros lo que queremos es concientizar a los mexicanos que los migrantes no salen por gusto de sus países, sino huyendo de la violencia, vemos en las calles de Honduras como el ejército ha tomado las riendas. No se puede vivir en paz cuando hay violencia, el objetivo es que los migrantes conozcan sus derechos”, explica el coordinador del Viacrucis, Irineo Mújica.
Sin embargo, en cavernario tono de “¡miren, no sé de qué se trata, pero hay que hacer algo para que no llegue a nosotros!” el republicano tomó el Viacrucis (el cual lleva más de 10 años realizándose en estas fechas, en clara referencia al viacrucis de Jesucristo) como un pretexto para animar su exigencia de endurecer las políticas migratorias de Estados Unidos. “La gran Caravana de personas de Honduras, que ahora cruza México y se dirige a nuestra frontera de “Leyes débiles”, advirtió Trump, quien previamente avisó que ni siquiera se tomará la molestia de estudiar el proyecto de ley que busca dar protección acerca de 700 mil dreamers… y ya, de pasadita, también se dio tiempo para nuevamente anunciar que es mejor terminar con el Tratado de Libre Comercio.
The big Caravan of People from Honduras, now coming across Mexico and heading to our “Weak Laws” Border, had better be stopped before it gets there. Cash cow NAFTA is in play, as is foreign aid to Honduras and the countries that allow this to happen. Congress MUST ACT NOW!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 3 de abril de 2018
“El Congreso debe aprobar de inmediato la legislación fronteriza, usar la opción nuclear si es necesario, para detener la entrada masiva de drogas y personas… ¡Congreso, actúe ahora, nuestro país está siendo asaltado!”, exigió haciendo referencia con eso de la “opción nuclear” al procedimiento que le da chance al Senado a decidir cualquier asunto con una mayoría simple de 51 votos, en vez de sobrepasar la regla de 60 para anunciar un consenso.
Pero bueno, debido a la indirecta de Trump hacía el gobierno mexicano de “no hacen nada para que los centroamericanos lleguen hasta mi frontera”, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) emitió un comunicado aclarando de qué va el “Viacrucis del Migrante” y asegurando que “bajo ninguna circunstancia, el gobierno de México promueve la migración irregular”. ¿Entonces qué hacen con tanto migrante? Pues bien, efectivamente el ingreso a territorio nacional de los migrantes provenientes del Triángulo Norte de Centroamérica (Guatemala, Honduras y El Salvador) se da sin que estos cubran los requisitos de la ley… sin embargo, gran parte se encuentra sujeto a procedimiento administrativo migratorio, mientras que otra gran cantidad son repatriados a sus lugares de origen.
¿Y los que aprovechen el viaje y quieran entrar a Estados Unidos? Ahhh, pues ahí sí, no es bronca de las autoridades mexicanas: “no compete a este gobierno ejercer decisiones migratorias de Estados Unidos o de cualquier otra nación, por lo que serán las autoridades competentes de la Unión Americana las que decidan, de ser el caso, autorizar o no el ingreso a su territorio de los integrantes de la caravana que lo solicitaran a través de los puertos de entrada y salida autorizados”, remata el comunicado.
