Y en la tierra donde hace apenas unos cuantos días el gobernador Javier Duarte firmó la “Alerta Temprana” de Protección a Periodistas en Veracruz, parece que dicho documento es letra muerta.
Elementos de cuerpos de seguridad vestidos de civiles arremetieron contra integrantes de la CNTE y SNTE que intentaban impedir la evaluación de docentes: macanazos, golpes, patadas y choques eléctricos fueron algunas de las finas tácticas que aplicaron en Xalapa, Veracruz y Boca del Río elementos de la Fuerza Civil y miembros de la policía local… además de reprimir a guamazos a los profesores, también algunos reporteros que cubrían la nota salieron salpicados.
Ejemplo de lo anterior fue el periodista de MVS, Iván Sánchez, quien fue interceptado por un grupo vestido de civiles el cual rompió su equipo fotográfico… con apoyo de la Fuerza Civil. También dos fotoperiodistas del Diario de Xalapa fueron interceptados y amenazados. De igual forma, son varios los testimonios de reporteros a los que elementos de Seguridad Pública les confiscaron celulares, tablets, cámaras y cualquier equipo en el que pudieran documentar fotos, audios y textos de los hechos.
“Ocho policías me arrinconaron pese a que me identifiqué como reportera, me arrebataron el celular y delante de mí lo destruyeron, me jalonearon, me decían que me fuera. Estoy muy encabronada”, señaló Melissa Díaz de Diario de Xalapa.
Sobra decir, que aunque los agresores vestían de civiles, la policía estatal no intervino… el único caso en que lo hizo fue cuando los profesores superaban en número al contingente que realizó los ataques. Además, durante el operativo de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), para “resguardar la evaluación educativa”, estuvo ausente el personal de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y personal de la Comisión Estatal de Protección a Periodistas.
Sobre las agresiones, ayer por la tarde el gobierno de Veracruz ofreció una disculpa, asegurando que el operativo de seguridad se llevó a cabo simplemente para garantizar la evaluación magisterial.
“La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) expresa de manera categórica que en ningún momento fue voluntad de esta institución afectar el desempeño profesional de los comunicadores que cubrían la nota y ofrece una sentida disculpa a quienes se hayan visto afectados durante el desarrollo del operativo de seguridad. El Secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, se ha comunicado con los titulares de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas (CEAPP) a efecto de ponerse a sus órdenes y ofrecer todas las garantías y pruebas que estos organismos requieran, con la finalidad de resarcir los daños ocasionados”.
Por su parte, los agredidos ya interpusieron una denuncia penal en contra de los elementos de la SSP, encabezada por Arturo Bermúdez, fino funcionario que apenas el viernes reprochó que los periodistas tienden al sensacionalismo, ya que “les gusta vender sangre”… y bueno, si eso es lo que venden, pues les echaron la mano para sacar la nota.
