Si verle los cachetes a Nicolás Maduro es una mentada de mother para los millones de venezolanos que sufren para conseguir lo básico para alimentarse, ahora imagínense lo que sintieron al verlo mover el bigote con un banquete preparado por el popular chef Nusret Gökçe, más conocido como Salt Bae.

Haciendo gala de su poca sensibilidad, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aprovechó el viaje que hizo a Rusia y China (países que visitó para pedir prestada lana con la que pueda alivianar la bronca económica de su país) y se dio tiempo para hacer una parada en Turquía, lugar en la que el chef Salt Bae tiene su popular restaurante, el cual es visitado por celebridades y gente de harta lana… total, él no iba a pagar.

Las imágenes del festín que se dio el líder de la República Bolivariana circularon alegremente en redes. Como era de esperarse, verlo aumentando la papadota que se carga con los cortes de carne preparados teatralmente por Salt Bae originaron una ola de recordatorios maternales y deseos falo hirientes contra la persona de Maduro quien, para incrementar los decibeles del generalizado “¡no la friegues!”, llevó gorrones a la gran comilona. Ahí andaba su esposa Cilia Flores.

Ahora sí, ni como ayudar al chavista. Como queriendo dar un mensaje de falsa solvencia a la comunidad internacional (la cual está al tanto de la difícil situación que viven los venezolanos), Maduro presumió que, pa’l “desempance”, llevó una cajita de finos puros… la caja, obviamente, personalizada con su ya muy maldecido nombre en letras doradas…

Y mientras tanto, los venezolanos:

Migrantes buscan refugio del frío en un puente de Ecuador // Foto: Luisa Gonzalez

Las imágenes del atascón que se dio Maduro fueron difundidas por medio de la cuenta Instagram y Twitter del chef Salt Bae, quien regaló unas playeras a la pareja presidencial venezolana. “Quisiera agradecer al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, por su visita”, escribió el turco quien fue invitado por el líder bolivariano a visitar Caracas (sí güey, para qué… si ni ingredientes para cocinar hay allá, pensó el alto cocinero).

Mientras Maduro se dio su atascón carnívoro, tuvo que suprimir el hecho de que – según la FAO – 3.7 millones de venezolanos sufren infraalimentación, un número mayor cuatro veces al del trienio 2010-2012. Pfff… todavía con el bocado en la boca, Maduro dijo al llegar a su país: “Le envío de aquí un saludo a Nusret. Nos atendió él personalmente, estuvimos conversando, disfrutando con él. Un hombre muy simpático, ama a Venezuela“… chaaaaaale.

Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com

Hola, soy Álvaro. Estoy en sopitas.com desde hace algunos años. Todo ha sido diversión, incluso las críticas de los lectores. La mejor de todas: "Álvaro Cortés, córtate las manos".

Comentarios