Este viernes, se anunciaron noticias preocupantes para Venezuela. En Caracas —y todo el país, obvio— la situación está complicada y más cuando falta menos de un mes para las elecciones presidenciales del 20 de mayo. Sin embargo, la cosa no acaba ahí: hace diez años, China le abrió una línea de crédito al país sudamericano por 50 mil millones de dólares y ya anunciaron que en estas fechas se les acabó el periodo de gracia.
De acuerdo a la agencia Reuters, en el 2015 el país asiático vio cómo estaba la situación y dejó de renovarle el crédito a Venezuela, pero ambos países llegaron a un acuerdo. En este arreglo provisional, Venezuela le mandaría barriles de petróleo a China pero solamente estaría pagando intereses.
Exclusive: Venezuela faces heavy bill as grace period lapses on China loans – sources https://t.co/Rtl4CeZ5Yc pic.twitter.com/XxBfAc5FXD
— Reuters Top News (@Reuters) 27 de abril de 2018
Las condiciones que puso Beijing, dejaron que Maduro medio mantuviera a flote el barco durante un tiempo. Sin embargo, después de la hiperinflación —13,000%— de los últimos años, la caída del precio del petróleo y una segunda reconversión monetaria —quitarle tres ceros al bolívar—, la cosa no suena bien. De acuerdo a las fuentes consultadas por Reuters, ahora sí no hay salida, ya tienen que empezar a pagarle completo a China.
Según los cálculos, pagar la feria completita sin importar si es en efectivo o en petróleo, les costará 7 mil millones de dólares anuales, una cifra bastante más alta de lo que se pueden permitir en estos momentos.
Además, como al perro más flaco se le pegan las pulgas, la producción de Petróleos de Venezuela es la más baja en los últimos 33 años.
Hasta el momento no se ha hecho público ningún acuerdo entre ambos países. Sin embargo, los expertos aseguran que el nuevo pragmatismo Chino y la deuda de Venezuela que ronda los 50 mil millones de dólares y dos mil millones más de intereses atrasados se puede poner incómodo.