Año con año en todo el mundo mueren 300 mil mujeres a causa del cáncer cervicouterino, enfermedad provocada en su mayoría por el virus del papiloma humano (VPH), colocándola como la quinta causa de muerte en mujeres. En México este cáncer es la segunda causa más importante de muerte, solo por debajo del cáncer de mama.
Pero, este tipo de cáncer es totalmente prevenible, ¿cómo? En primer lugar con la vacuna contra el VPH.
Vámonos por partes…
¿Qué es el VPH?
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el virus del papiloma humano es uno de los virus más frecuentes de transmisión sexual en el mundo. Es más, si no han sido vacunadas, la mayoría de personas tendrá una infección por VPH en algún momento de su vida.
Esta infección causa diversos trastornos, tanto en hombres como mujeres y aunque no todos los tipos de VPH causan cáncer, algunos terminan en cáncer cervicouterino, cánceres orofaríngeos o anogenitales. Se sabe que hay más de 100 tipos de VPH y cada uno se identifica con un número, siendo los más frecuentes el VPH-16 y VPH-18.
Algunos tipos de virus pueden causar verrugas genitales o anales pero no causan cáncer. Estas verrugas son protuberancias visibles, húmedas, blandas y del color de la piel que en algunos casos desaparecen espontáneamente o requieren tratamiento.
Solo para que nos demos una idea, en conjunto los tipos 16 y 18 del VPH son responsables de aproximadamente un 70% de los casos de cáncer cervicouterino a nivel mundial.
Hasta el momento se han autorizado tres vacunas inocuas —que no causan daño físico o moral— y que son sumamente eficaces para prevenir la infección por los tipos del virus de alto riesgo.
¿Qué es el cáncer cervicouterino?
El cáncer cervicouterino, que también es conocido como cáncer de cuello en la matriz o cáncer de cuello uterino, es un tumor maligno que inicia en esta parte del cuerpo y se presenta con más frecuencia en mujeres mayores de 30 años.
Los síntomas son flujo vaginal inusual, sangrado después de la menopausia, pérdida de peso sin explicación, dolor o sangrado después del coito, incomodidad o pérdida de control al orinar, sangrado vaginal anormal, dolor en las piernas y dolor en la espalda.
De acuerdo con la doctora Karla Unger Saldaña, investigadora del Instituto Nacional de Cancerología, el cáncer cervicouterino es el único que es completamente prevenible y que con el tratamiento adecuado se puede evitar la muerte.
Para que nos demos una idea de la importancia del control médico y un tratamiento oportuno, la investigadora realizó un estudio tomando en cuenta 432 expedientes clínicos de pacientes del Hospital General de México “Dr. Eduardo Liceaga” y el Instituto de Cancerología. Encontró que la mayoría recibió atención con un retraso de 7 meses, además de que fueron diagnosticadas con una etapa muy avanzada de la enfermedad.
¿Qué tipo de vacunas existen para prevenir el VPH?
Como lo mencionamos, hasta el momento se han autorizado tres vacunas: bivalente, tetravalente y nonavalente. Las dos últimas son eficaces en la prevención de las verrugas genitales y anales. De todos los tipos de VPH que existen, más de 40 se transmiten por contacto sexual directo, hay dos que causan verrugas genitales y cerca de 12 que causan cánceres.
Al igual que otras vacunas, las vacunas contra VPH estimulan al cuerpo para que produzcan anticuerpos que se unan al virus cuando la persona está expuesta y le impidan infectar a las células. Lo que hay que aclarar es que las vacunas no protegen contra otras enfermedades de transmisión sexual ni tratan a las infecciones por VPH o enfermedades causadas por VPH existentes.
Fue en 2006 cuando se presentó en el mercado internacional la primera vacuna contra el VPH, la tetravalente. Esta protege contra el VPH 6, 11, 16 y 18 con una eficacia del 99% contra lesiones en el cuello uterino, de 100% contra lesiones en la vulva y vagina, así como en un 99% contra lesiones genitales externas.
La vacuna bivalente se presentó un año después, en 2007, contra el VPH 16 y el 18. Tiene una eficacia de casi el 100% contra las lesiones en el cuello uterino. Finalmente la vacuna nonavalente protege a la persona contra los virus VPH 6, 11, 16, 18, 31, 33, 45, 52, y 58.
Las tres vacunas aprobadas por la FDA son Gardasil, Gardasil 9 y Cervarix.
Las tres protegen de la infección por los tipos 16 y 18 de VPH, dos de los virus del papiloma humano de alto riesgo que causan cerca de 70 % de los cánceres de cuello uterino y un porcentaje todavía mayor de algunos de los otros cánceres causados por el VPH. Gardasil protege también de la infección por los tipos 6 y 11 de VPH, los cuales causan 90 % de las verrugas genitales. Gardasil 9 protege de la infección por los mismos cuatro tipos de VPH y otros cinco tipos de VPH que causan cáncer (31, 33, 45, 52 y 58).
¿Cuándo se debe aplicar la vacuna contra el VPH?
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, se recomienda la vacunación contra VPH para estos grupos de la población:
- Infantes y adultos de entre 9 y 26 años de edad. Generalmente se recomienda aplicar la vacuna a los 11 o 12 años de edad, aunque se puede aplicar desde los 9 años. En caso de que un niño o niña no se haya vacunado, puede hacerlo hasta los 26 años.
- Adultos de entre 27 y 45 años. En Estados Unidos se autorizó el uso de la vacuna para personas de hasta 45 años, pero no se recomienda para todos los adultos en general. Cada persona debe consultar con su médico para determinar si requiere la vacuna, ya que es menos beneficiosa en este grupo de edad de personas que ya se expusieron al virus en algún momento.
Para los niños y niñas que reciben la vacuna antes de los 15 años, se requieren dos dosis de cualquiera de las vacunas para tener una protección completa. Las personas que reciben la vacuna después de esa edad, necesitan tres dosis, aunque actualmente se está evaluando la eficacia de la vacuna en una sola dosis.
Solo el médico en cuestión determina qué tipo de vacuna se aplica a cada paciente.
¿En dónde me puedo poner la vacuna contra VPH?
En México la Secretaría de Salud, el IMSS y las secretarías de Salud estatales ofrecen campañas de vacunación contra VPH a niñas y niños en edad escolar, específicamente a las 11 años, aunque generalmente las campañas de vacunación en las escuelas se enfocan a niñas para prevenir el cáncer cervicouterino.
En las Semanas Nacionales de Vacunación se instalan módulos de vacunación contra el VPH en las escuelas de todo el país, además de los hospitales del sector salud, centros de salud y unidades médicas en general.
Si tienes una hija, sobrina, eres tutor o tutora de una niña que tenga alrededor 11 años, acude al centro de salud más cercano o a la unidad del IMSS que te corresponde para que te informen cuándo aplican vacunas contra el VPH.
Generalmente en las escuelas llegan las campañas de vacunación y piden autorización a los padres de familia para aplicar las dosis.
Si optas por la aplicación de la vacuna en un hospital o consultorio privado, los precios en México van desde mil y hasta más de 2 mil pesos por dosis, requiriendo tres dosis para una persona mayor de 15 años.
De acuerdo con la OMS, en 2020, el 13% de las niñas de 9 a 14 años en todo el mundo fueron vacunadas contra el VPH. ¿Es muy poco, no? Y aquí va otro dato todavía más preocupante: en los países que registran casi dos tercios de cáncer de cuello uterino en el mundo, aún no han introducido esta vacuna.
No dejemos pasar el tiempo y vacunémonos contra el VPH para prevenir cánceres y la transmisión generalizada de la enfermedad.
La quinta causa de muerte en mujeres: ¿Qué es el cáncer cervicouterino y cómo se puede prevenir?