Parece que el lema del gobierno federal, “Mover a México” podría mayores alcances, ya que si bien a nuestras autoridades el caso Atoyzinapa parece que les ha hecho lo que el viento a Juárez, en el extranjero podría haber más movimiento del esperado.
En más de 40 ciudades de los Estados Unidos grupos de estudiantes, dirigentes de comunidades mexicanas y latinas, activistas pro migrantes y organizaciones religiosas son parte de una acción denominada #USTired2 (si su nivel de inglés anda más o menos igual que el de EPN, aun así les dará para darse cuenta que eso quiere decir algo como Nosotros también estamos cansados); como notarán, este movimiento es la respuesta gringa al conocido ashtag #YaMeCansé –desaparecido como TT ayer, por cierto– y que pretende exigir al presidente Barack Obama cancelar el financiamiento que se le otorga a México con la Iniciativa Mérida.
Hay que recordar que dicha iniciativa de seguridad emanada desde Washington tiene la intención de combatir el narcotráfico, sin embargo, para los manifestantes con el proyecto se financia una fuerza que viola los derechos humanos… además de que no les gusta la idea de que Estados Unidos otorgue dinero de sus arcas y a final de cuentas el dinero vaya a parar quién sabe a dónde… algo de mala fama tienen las autoridades mexicanas por aquellas tierras:
“Es un esfuerzo comunitario de mexicanos residentes en Estados Unidos que queremos que nuestro dinero de impuestos no financie al gobierno mexicano, que es corrupto”, comentó una de las manifestantes.
Este hecho no tiene precedentes en tierras del vecino del sur, ya que decenas de personas salieron a las calles de distintas plazas y edificios públicos para manifestarse por las desapariciones de miles de personas en nuestro país, hecho que consideran suficiente para el también conocido como “Plan México” deje de recibir el apoyo multimillonario que brinda Estados Unidos.
Albuquerque, Nuevo México; Atlanta, Georgia; Austin, Texas; Baltimore; Bellingham, Washington; Berkeley, California; Boston, Massachusetts; Chicago, Illinois; Columbia, South Carolina; Dallas- Fort Worth, Texas; Detroit, Michigan; El Paso, Texas; Fayetville, Arkansas; Ferguson, Missouri; Fresno, California; Gainesville, Florida; Greenville, North Carolina; Harrisonburg, Virginia; Hoover, Alabama; Houston, Texas; Jackson, Mississippi; Los Angeles, California, son sólo algunas de las ciudades estadounidenses donde se llevaron a cabo manifestaciones.
Mientras en las calles del vecino del norte el grito es #YaMeCansé “del apoyo que da el gobierno estadounidense a fuerzas de seguridad en México que han torturado, desaparecido y matado a miles de personas”, en el interior de la Casa Blanca la cosa es distinta: a través de la portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, el gobierno de Obama avaló lo hecho por las autoridades mexicanos respecto a la desaparición de los normalistas, asegurando que se que actuó de manera expedita en las investigaciones del caso Ayotzinapa, por lo que se seguirá trabajando como hasta ahora… bueno, quizás sostengan un diálogo sobre cuestiones de derechos humanos, que buena falta les hace a ambas partes.
Entrevistado para CNN, el organizador de #USTired2, Roberto Lovato, comentó que “En Estados Unidos somos millones que al igual que miles de mexicanos, decimos ‘Ya me cansé’, sólo que en inglés”, por lo que piden dejar de financiar una “fallida y catastrófica guerra contra las drogas que ha dejado más de 100 mil muertos y 25 mil desaparecidos en México”.
Además de lo anterior, también se presiona para que el gobierno de México investigue a fondo no sólo la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, también la de miles de personas cuyo paradero se desconoce: “Mucha gente en este país tiene familiares que han desaparecido. Entonces nuestro pedido de que investiguen las desapariciones no es en solidaridad (con los familiares de los estudiantes), sino como familiares de los desaparecidos”, comentó Rubén Tapia, organizador del movimiento en Los Angeles.