Se confirma lo que hace unos días era una mera especulación: uno de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa era militar. Aunque hace una semana que Proceso dio a conocer esta información, el nombre del presunto integrante de las fuerzas armadas era manejado como “confidencial”, ahora el mismo semanario difunde la identidad del normalista que perteneció al Ejército, dato que es confirmado por su propio padre.
De acuerdo con la publicación capitalina, Rafael López Catarino, padre de Julio César López Patolzin, señala que su hijo efectivamente fue militar; sin embargo, “desertó” el año pasado con el fin de poder ingresar a la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa.
Entrevistado por Proceso, López Catarino acepta que su Julio César estuvo adscrito a la 35 zona militar con sede en Chilpancingo, pero en 2013 –durante labores de contingencia de los huracanes Ingrid y Manuel– sufrió un accidente, el cual lo motivó a retirarse del Ejército luego de haber servido por dos años.
Desde el pasado 16 de junio, cuando Apro reveló las informaciones de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), las reacciones no se hicieron esperar: Omar García, uno de los normalistas que logró escapar de las agresiones ocurridas el pasado 26 de septiembre, señaló que el hecho evidenciaría la presencia de “infiltrados” en la normal “Raúl Isidro Burgos”. Al respecto, el padre de Julio César señala que éste no es el único caso de un militar que ha estudiado en la normal rural de Ayotzinapa, por lo cual reprochó cualquier intento de desacreditar a su hijo o de pretender culparlo de lo ocurrido en Iguala hace casi un año.
“No se vale que la estén agarrando contra mi hijo sólo porque fue militar y digan que es infiltrado, porque él ya había desertado”.
En lo referente al desgaste del movimiento –principalmente en lo físico y moral de los padres de los 43 normalistas desaparecidos- López Catarino acusó que éste se debe a la falta de transparencia en el manejo de recursos, así como a la falta de respuesta por parte de las autoridades.
Según Rafael López, en una de las reuniones de los familiares de los 43 se le exigió presentar un documento que avale la baja de su hijo del Ejército; sin embargo –señala- como desertor tal oficio no existe. El resto de los padres de los normalistas acordaron exigir la información directamente con la Sedena.
@plumasatomicas