Ni modo gobierno… de nuevo es más que cuestionable la “verdad histórica”.
Aunque hace unos días PGR aseguró que, con base en estudios, se pudo determinar que en el basurero de Cocula hubo un incendio en el que al menos 17 cuerpos fueron incinerados… y por lo tanto estos correspondían a algunos de los 43 normalistas desaparecidos desde septiembre de 2014. Ahora son los especialistas de la Universidad de Innsbruck, Austria, quienes ponen esto en duda.
Según un comunicado emitido por la propia Procuraduría General de la República (PGR), para los científicos de la institución austriaca “no fue posible obtener hasta el momento, identificación de perfiles genéticos, en la totalidad de las muestras de los restos óseos, por las técnicas tradicionales de ADN nuclear, ni ADN mitocondrial”.
Sin embargo, para que no haya dudas y a ver si ahora sí se confirma lo que las autoridades han presumido, el Instituto de Medicina Legal de la Universidad de Innsbruck realizará más estudios a las muestras. Los resultados serán recibidos posteriormente, señalan las autoridades.
Urgente: El estudio de la Universidad de Innsbruck no pudo demostrar que los restos de ADN analizados corresponden a alguno de los 43.
— Vidulfo Rosales (@VidulfoRosales) 9 de abril de 2016
Según detalla la PGR, el sobre con los resultados que ofrecieron los de Innsbruck fue abierto en presencia del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), representantes de los padres de los normalistas desaparecidos, el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) y de la Procuraduría General de la República (PGR).
Pese a que se entregaron “53 muestras de ropa y cabellos adheridos a la ropa que se encontraron en los autobuses (…) 9 muestras óseas y cabellos, provenientes del basurero de Cocula y 2 muestras óseas de la bolsa del Río San Juan”, ninguna pudo ofrecer información relacionada a algún perfil genético de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa.
Apenas hace unos días, el ex titular de la PGR, Jesús Murillo Karam, señaló tajantemente que los últimos informes respaldaban la llamada “verdad histórica”: los normalistas fueron incinerados. Según Murillo, esto era respaldado por un informe dado a conocer por el GIEI, en el que se señaló que había indicios de un incendio ocurrido en el basurero de Cocula y que al menos 17 cuerpos fueron quemados.
Para los del GIEI las autoridades hicieron un uso político e irresponsable del informe… cuando apenas era preliminar. Por esto, recientemente anunciaron la ruptura de relaciones con las autoridades… sin que ello signifique que el caso deba ser cerrado.
“Hay líneas de investigación abiertas, casi inexploradas que los miembros del GIEI han pedido que se sigan. La obsesión era Colula y todo se ha centrado allí. También se ha incumplido la promesa de permitir una segunda ronda de entrevistas con los detenidos”, aseguran fuentes de la investigación.
Ya que no les han ampliado el plazo para seguir colaborando, el último informe oficial del GIEI será dado a conocer posiblemente el próximo 24 de abril.