La historia que están por leer es rara, conmovedora e inexplicable.
Hace un par de semanas, en la ciudad de Cuernavaca falleció Margarita Suárez. En vida, esta señora era conocida por ser una protectora y amante de los animales. Diariamente alimentaba a cerca de 20 gatos sin dueño que la visitaban en su casa. Sobre esta empatía de su mamá con los animales desprotegidos, su hija Patricia Urriata dijo:
“Cada vez que veía a un perro en la calle regresaba a casa para darle de comer”.
Esta amor a los animales, quizá explique lo que ocurrió después, cuando los restos de Margarita fueron trasladados a Yucatán para ser velados.
Hoy hace u a semana a esta hora, dejó tu cuerpo de respirar, tus latidos se vencieron, y tu aroma se perdió.Madre de mi…
Posted by Patricia Urrutia on Sábado, 21 de marzo de 2015
Era de madrugada, y los familiares y amigos se encontraban en una funeraria esperando que prepararan el cuerpo. De pronto irrumpieron en el lugar varios perros, que de forma amigable comenzaron a jugar con los asistentes.
estoy contigo en estos momentos de dolor y tristeza como tu mami soy fanatica defensora de los animales y los amo mucho veo esas fotos y me hn hecho llorar
Posted by Rosa Elvira Cerero on Sábado, 21 de marzo de 2015
Patricia calificó lo ocurrido como un hecho maravilloso e inexplicable:
“Eran como las tres de la mañana. Primero se acostaron sobre el suelo como puede verse en las fotos, pero después llegó el cuerpo de mi madre y los perros se levantaron como si estuvieran en una fiesta.
Mi cuñado preguntó si los animales eran de ahí y le contestaron que no, que nunca los habían visto”.
Los perros se recostaron en el suelo y no se marcharon hasta el otro día. Sin embargo, uno de ellos se quedó acostado en el pasillo. Una hora después volvió el resto de la jauría, y se quedaron en la funeraria hasta minutos antes de que el cuerpo de Margarita fue llevado a cremar.
“Veinte minutos antes que lleváramos a cremar a mi madre los perros se fueron como llegaron, con una fiesta. En medio del dolor, ellos brincaban de alegría, fue algo maravilloso”
A pesar del dolor por perder a su mamá, Patricia asegura que aquellos visitantes peludos y juguetones eran ángeles. Este suceso, así como las fotografías de los animales en el velorio, se volvieron virales en las redes sociales:
También hay un video de un pájaro que a las 3:30 de la madrugada llegó a la funeraria. Sí, sabemos que es raro toparse con un pájaro a esas horas de la noche.
¿Ángeles? ¿Los animales son agradecidos? ¿Una hermosa coincidencia? De cualquier forma, lo ocurrido es un homenaje a la labor que en vida desempeñaba Doña Margarita.
