¿Y ahora quién nos regresará tantas lágrimas derramadas?… por si lo hubiéramos hecho.
Esta semana se volvió altamente viral una conmovedora imagen que presentaba a un supuesto niño sirio que dormía entre las tumbas de sus dos padres. Muchos calificaron lo plasmado como “la foto más triste jamás vista” o de menos lanzaban la expresión “¡qué gacho!”, pero ahora sabemos que tal imagen es el resultado de un montaje.
En un inicio, la foto fue posteada por Ahmed Jarba, líder de la oposición siria, quien, inclusive, acusó al presidente Bashar al Assad de la orfandad del pequeño: “Los niños sirios se han quedado huérfanos por la brutalidad de Assad. Son 5 millones de niños afectados por la crisis. Este número se ha triplicado este año”, era el texto que acompañaba a la imagen.
Sin embargo, el periodista Harald Doornbos fue uno de las primeros en darse cuenta y señalar que la fotografía era “falsa”, es decir, que realmente formaba parte de un proyecto artístico de un fotógrafo saudí conocido como Abdul Aziz Al-Otaibi, a quien contactó y fue el propio artista quien aclaró la naturaleza de la imagen: “Mira, no es cierto en absoluto que mi imagen tenga algo que ver con Siria… Estoy realmente sorprendido por cómo las personas han tergiversado mi imagen”.
Otabi comentó la inexistencia de la tragedia: las “tumbas” no eran más que montones de tierra y el supuesto huérfano es su sobrino. Además, en la cuenta Instagram del fotógrafo puede verse al infante sonriendo para la cámara desde el lugar en el que fue tomada la impresión que conmovió a miles. “Incluso publiqué el backstage. Quería estar seguro de que la gente no sacara falsas conclusiones”. añadió Otabi.
¨No es justo tomar una de mis fotos y sacarla totalmente de contexto para usarla para tu propia propaganda”, concluyó vía telefónica Otabi.
Quizá Jarba ni enterado estaba de que la fotografía fue montada, pero la eliminó poco tiempo después de su Twitter… un poco tarde, porque la imagen ya se había propagado por las redes sociales.
