Lo que necesitas saber:
A grandes rasgos, la UIF detectó que el consorcio Latinus recibió recursos de diversos estados, los cuales supuestamente eran para la contratación de servicios de salud... pero en realidad habrían sido triangulados para el pago de accionistas y periodistas.
Algunos lo llaman ataque a la libertad de expresión, persecución a periodistas, etcétera… para la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) es simplemente checar asuntos que tienen que ver con Latinus y actos de corrupción, así como operaciones con recursos de procedencia ilícita. Nada de investigación contra Carlos Loret de Mola ni contra Víctor Trujillo, Brozo, como se ha dicho.
Investigación contra Latinus es desde 2021
Luego de que se ventilaran aspectos de esta investigación, la UIF acabó por confirmarla como es (bueno, como dice que es). Su titular, Pablo Gómez, acudió a la mañanera de AMLO y dio detalles de la investigación a Latinus, la cual no es de apenas… desde 2021 analizan información que le ha llegado y que pudiera vincular al medio de comunicación con delitos de corrupción y operaciones con dinero de dudosa procedencia (lavado, pues).
“En total, estamos hablando de una cantidad significativa desde el año 2019 a 2024, de dos mil 437 millones de pesos”, señaló el titular de la UIF. “No estamos inventando, sencillamente tiene el consorcio [Latinus] unas empresas instrumentales [que] reciben recursos por compra de servicios periodísticos directamente o a través de tres empresas que venden servicios médicos o de salud a entidades federativas”.
El pasado 23 de junio, la periodista Peniley Ramírez denunció en su columna publicada en Reforma que las autoridades investigaban a Latinus… pero también al periodista Carlos Loret de Mola y al comediante y analista político, Víctor Trujillo, Brozo. ¿Por? Eso no lo dejó claro Peniley… aunque insinuó que todo era por la difusión de una serie de reportajes que vinculaban a los hijos del presidente López Obrador con contratos irregulares del Tren Maya. Una especie de “venganza”, entonces.
Una de las empresas del consorcio Latinus se estableció en un paraíso fiscal
A lo anterior, Pablo Gómez dice “no” (según). Ni Loret de Mola ni Brozo el payaso tenebroso están siendo investigados por la UIF (ni la esposa del periodista, como señaló Peniley Ramírez). Sólo el consorcio Latinus…
“De las actividades administrativas que llevan a cabo la Unidad de Inteligencia Financiera, ninguna corresponde con el señor Carlos Loret de Mola. El señor Carlos Loret de Mola no aparece como accionista, codueño, ejecutivo, manager, gerente de un consorcio empresarial que se llama Latinus, que es otra cosa, independientemente de que él, junto con otras personas más, les preste servicios y les cobre”.
A grandes rasgos, Latinus ha recibido recursos de los gobiernos del Estado de México, Michoacán, Nuevo León, Sinaloa, Tamaulipas e Hidalgo… los contratos dicen servicios de salud, cuando en realidad se triangulan para el pago de accionistas y periodistas.
Lo anterior sólo es un poquito de lo que se ha investigado, ya que una de las empresas del consorcio Latinus fue establecida en Delaware, Estados Unidos… un lugar considerado paraíso fiscal y que, por lo mismo, dificulta la obtención de datos.
“Los registros de propiedad en Delaware son muy opacos y no están a disposición del público, es difícil conseguirlos, pero, bueno, vamos a hacer la lucha porque estamos obligados a saber de quién es el dinero”.
Loret ha hecho de la calumnia un negocio: Pablo Gómez
Respecto a lo que Peniley Ramírez señaló sobre la recepción en la UIF de información financiera del periodista y Brozo, Pablo Gómez dio a entender que eso es “inevitable”, ya que a la UIF llegan diariamente reportes (directo de toda clase de entidades financieras) de actividades que consideran sospechosas… y ya, si de verdad se ven muy irregulares, entonces la Unidad las analiza y canaliza. “No hay un criterio oficial aquí, más que el de la ley”… pero, hasta el momento, no hay nada en contra del periodista.
Luego de explicar los aspectos que a la UIF se le hacen sospechosos respecto a la forma en que se distribuye el dinero dentro de Latinus, Pablo Gómez se lanzó directamente y a titulo personal contra Loret de Mola. Al funcionario le prendió que el periodista dijo que era una vergüenza que él, habiendo sido activista del 68, ahora lo persiguiera por sus “ideas”.
Así le respondió Pablo Gómez: “La generación que desde los años 60 luchó por las libertades en México no tiene nada de qué avergonzarse ni darle explicaciones a las personas que se dedican a la calumnia, y hacen de ella un negocio, hacen de ella un negocio. Y este es el caso, porque el consorcio Latinus se caracteriza por eso con recursos públicos, pero recursos públicos ilegales”.
