A casi un mes de que se realice en Reino Unido la audiencia para resolver la extradición de Karime Macías, se da esta información que acaba de relacionar a la susodicha con las transas que se dieron en Veracruz durante el gobierno de Javier Duarte (de quien Macías es esposa, por si no recuerdan).
Luego de conseguir establecer la relación de Karime Macías con una red de empresas fantasma que operó en Veracruz durante el gobierno de Javidú, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) bloqueó las cuentas bancarias de la exprimera dama jarocha.
Lo anterior fue confirmado por fuentes de la defensa de doña “Sí merezco abundancia” a Animal Político… aunque ya ni les cayó de novedad, ya que previamente las cuentas de Karime Macías ya habían sido canceladas por otra investigación relacionada con delitos fiscales.
Sin embargo, El Universal señala que el abogado de Karime, Marco Antonio del Toro, dice que 1) ni siquiera han sido notificados de la orden que bloquea las cuentas… y 2) aunque exista, pues ¿cuáles? Según el abogado de Macías, ésta ya ni siquiera tiene cuentas bancarias en México.
Con cuentas o sin cuentas en México, el abogado de Karime Macías advirtió que el bloqueo ejecutado por la UIF abre la puerta para que se interponga un nuevo amparo. Éste sería contra la acción fiscal y para evidenciar que el proceso contra la exprimera dama de Veracruz tiene ciertas violaciones.
En febrero se resuelve la extradición de Karime Macías
Karime Macías se encuentra en Reino Unido, donde desde 2019 fue detenida a petición de las autoridades mexicanas. No obstante, lo que no se ha conseguido es la extradición. Ese trámite aún está en veremos.
De acuerdo con El Universal, la orden para congelar las cuentas de Karime Macías fue emitida el pasado 10 de enero, fecha en la que se realizó la última audiencia del proceso de extradición… y donde determinó que el próximo 17 de febrero se sabrá la resolución final del asunto.
De ser extraditada, Karime Macías llegará a México para explicar qué onda con las investigaciones que señalan que, desde el DIF de Veracruz, fueron desviados aproximadamente 415 millones de pesos por medio de contratos ofrecidos a empresas fantasma. Una cifra cuatro veces mayor a la que indica la Fiscalía veracruzana.
