Este fin de semana, sucedió un evento tanto histórico como triste: murió la primera persona atropellada por un coche que no traía conductor.
Los coches autónomos, están viviendo una etapa de prueba masiva en Estados Unidos, y por desgracia, tuvieron su primer gran falla. Este lunes, 19 de marzo, una mujer de 49 años falleció al ser atropellada por uno de estos modernos autos, casualmente operado por la empresa Uber.
Primer atropello mortal de un Uber autónomo: muere un peatón en EEUU https://t.co/8pI2dWBIF8
— Teknautas (@Teknautas) 19 de marzo de 2018
El accidente, sucedió en Temple, Arizona; una de las cuatro ciudades que permitieron las pruebas de los vehículos autónomos. Según los reportes oficiales, la mujer caminaba con su bicicleta mientras atravesaba la calle fuera del paso de peatones.
Lo extraño del asunto es que, según las fuentes de la policía, el auto no se detuvo antes del impacto y estaba circulando como a 60 kilómetros por hora. También, aunque el auto se maneja solo, traía un conductor para emergencias por si las dudas, pero al parecer, no reaccionó ante el cruce de la ciclista.
Our hearts go out to the victim’s family. We’re fully cooperating with @TempePolice and local authorities as they investigate this incident.
— Uber Comms (@Uber_Comms) 19 de marzo de 2018
Ha sido un inicio rocoso para los coches autónomos. El año pasado, tuvieron que detener las pruebas después de que uno de sus autos chocara en una intersección. También, en 2016, el piloto de un Tesla automático murió cuando chocó contra un camión.
Por el momento, tras el accidente de la mujer en Arizona, Uber ha suspendido todas sus pruebas de vehículos autónomos y le deja un amargo sabor a todos los entusiastas de la tecnología: antes de sentirnos como Los Supersónicos, tendrán que probar que todos estos avances son seguros.
*Foto de portada: Uber