Si apenas te estás despertando y crees haber tenido una pesadilla, conoce a este bicho que de verdad parece que salió de la mente de un hombre que se fue a la cama después de empacarse tres órdenes de campechanos y un refresco de grosella…
El terror de los mares tiene el nombre de Eunice aphroditois, pero más es más conocido como “gusano Bobbit”… aunque muchos dirán que en cierta forma parece inofensivo, se sorprenderán de las técnicas que tiene para aniquilar a su presa: lo puede cortar a la mitad o bien, si quiere un trabajo limpio, puede inyectarles toxinas para consumirlas de una forma elegante y sencilla.
Si con la imagen ya están retractándose de su próximo viaje a Oaxtepec, no se preocupen… este gusano sólo es común en aguas tropicales y se localiza a más de 150 metros de profundidad.
Pero en caso de que seas amigo de Roberto Palazuelos y este fin de semana te haya invitado a bucear, debes tener tus precauciones, ya que aunque se ve chiquito, esta bestia puede crecer hasta tres metros para capturar a su presa, la cual a veces es más grande que él mismo.
El buen Bobbit es un gusano Policleto –no, no de los que andan en bici- poliqueto acuático predador. A pesar de la mayor parte del tiempo estar enterrado en la arena, con el juego de cinco antenas que posee detecta el mínimo movimiento de su próxima comida…
Ah, por suerte sólo lo han rastreado en aguas del océano Índico y Atlántico… pero aún así.
