Luego de darse a conocer el video en el que aparece dándole algunos consejos a Servando Gómez “La Tuta” –y no precisamente de actitud ante la cámara– a cambio de una buena mochada, el ahora ex corresponsal de Televisa en Michoacán, Eliseo Caballero, ha hecho del conocimiento de sus colegas y público en general, bajo qué circunstancias se dio su encuentro con el líder de los Caballeros Templarios… ya quedará a su consideración si lo juzgan o le dan el beneficio de la duda.
Según relata el reportero, primero se le hizo llegar una “convocatoria” para interactuar con “La Tuta”, a la que le siguió una confirmación vía telefónica… bueno, más bien algo que no era ni petición, sino “una orden”: “si no vas, nosotros te llevamos, recuerdo palabras más palabras menos, acompañado de un listado de nombres de personas allegadas a mí de las que dijeron saber todas sus actividades, sólo para asegurar mi asistencia”.
Así como le ha pasado al hijo del ex gobernador michoacano, a alcaldesas y demás personajes que han sido evidenciados en video junto al líder templario, Eliseo asegura que no hacerle caso al llamado “no era una opción” ya que quienes han optado por ese camino terminaron o muertos o perseguidos…
A la de a fuerzas, el corresponsal acudió al llamado de “la Tuta”, pero aprovechando la ocasión también sacó sus dotes histriónicos, ya que para que el templario no se enojara y lo viera “como enemigo”, hizo “lo posible por parecer amistoso”… de no haberse mostrado buena onda con el “amo de los videos”, “tarde o temprano me exigiría publicar notas que no podría publicar y con ello vendría el consiguiente castigo…”
Con lo anterior, Eliseo justifica su reunión alegando que –además de ser para salvar el pellejo– también le sirvió para obtener información de “primera mano”… claro, siempre siguiendo la línea editorial de Televisa, empresa a la que excluyó de cualquier vínculo con “La Tuta”:
“Creo que no es necesario recordar que los controles editoriales de la empresa Televisa hacen imposible que hubiera habido una nota aceptada (ni siquiera la hubo como propuesta) con las características que estos grupos requerían y que eran: ataques directos a autoridades federales, al ejército, a los gobernantes, ocultamiento de información o difusión de mantas, datos y acontecimientos falsos o tendenciosos, lo cual se pude confirmar con los archivos históricos de todas mis coberturas periodísticas”.
Aquí la carta íntegra, publicada por Animal Político: