Con ganas de que se arme la quiniela para atinarle a la fecha en la que Donald Trump sacará sus chivas de la Casa Blanca, el Washington Post confirmó ayer que, el que miembros y ex integrantes de la administración de Donald Trump estén compareciendo ante el Comité de Inteligencia del Senado no es nomás porque sí… como muchos esperaban/sospechaban, sí: el presidente estadounidense está bajo investigación por posible obstrucción de la justicia.
Citando no a una, sino a cinco fuentes, el diario gringo informó que el fiscal especial que investiga la injerencia de Rusia en las elecciones presidenciales del 2016, Robert Mueller, decidió ampliar su investigación y, ahora, tiene en la mira la posibilidad de que el republicano haya interferido en las pesquisas que el exdirector del FBI, James Comey, hacía sobre el papel del Kremlin en los comicios.
Según señala Time, la decisión de Mueller se debió -sobre todo- por las declaraciones que hizo la semana pasada el propio Comey, quien insinuó que su despido de la dirección del FBI fue influido por las investigaciones que realizaba sobre el entramado ruso.
Al respecto, un portavoz del abogado de Trump, Marc Kasowitz, cuestionó la legalidad de la filtración de información sobre la investigación, pero no negó el informe de The Washington Post.
Nomás para saber a qué acusación se enfrentará Trump (de confirmarse la información de TWP), la obstrucción de la justicia se define como el acto en el que alguien altera o interviene intencionalmente con una investigación en curso. Esto encajaría a la perfección con lo declarado por Comey, quien declaró la semana pasada en el Senado estadounidense que Trump le pidió que dejara de investigar al exasesor de Seguridad Nacional, Mike Flynn.
They made up a phony collusion with the Russians story, found zero proof, so now they go for obstruction of justice on the phony story. Nice
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 15 de junio de 2017
Aunque Comey señaló a los legisladores no estar seguro si los comentarios del republicano constituían una obstrucción de la justicia, al final de su comparecencia no dejó de señalar que “eso” ya estaría a criterio del Comité encabezado por Mueller. Y vaya que le hicieron caso.
De acuerdo con La Jornada, expertos consideran que el Departamento de Justicia no puede presentar una acusación formal contra un presidente, pero el resultado de las investigaciones podrán ser evaluadas por el Congreso, el cual decidirá si inicia un proceso de impeachment contra el mandatario.
Pequeño detalle: el Congreso norteamericano en estos momentos está bajo control republicano, así que todo luce para que tengamos Trump para rato… y él lo sabe, por eso muy temprano se encargó restar importancia a lo publicado por The Washinton Post.
“Armaron una colusión falsa con la historia de los rusos, encontraron cero pruebas, por lo que ahora van por la obstrucción de la justicia en la historia falsa. Bien”, tuiteó el mandatario naranja, para quien todo esto no es más que una “cacería de brujas”.
You are witnessing the single greatest WITCH HUNT in American political history – led by some very bad and conflicted people! #MAGA
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 15 de junio de 2017