Para recordarnos cómo es que llegó a la presidencia de Estados Unidos, ayer Donald Trump ofreció un discurso en el presumió los logros conseguidos durante el año que lleva al frente de la Casa Blanca y, bajita la mano, delineó un país en el que no hay cabida para los inmigrantes… a menos de que los gobiernos de los que proceden -México, por ejemplo- lo ayuden a cumplir sus promesas de campaña… digamos, la construcción del muro fronterizo.

 

Como era de esperarse, en su primer discurso sobre el estado de la Unión (la versión gabacha del Informe Presidencial), Trump no dejó de echarse elogios y asegurar que Estados Unidos está en la puerta del “nuevo sueño americano”. “Nunca hubo mejor tiempo para empezar a vivir el sueño americano”, dijo el presidente, para luego describir su proyecto de reforma migratoria, el cual se basa en “cuatro pilares” que habrán de analizar los legisladores, ahora que regresen a intentar destrabar la solución para el DACA… y así evitar otro paro de gobierno.

Uno. El “generoso” ofrecimiento de naturalizar a 1.8 millones de indocumentados, entre ellos los 800 mil dreamers. “Bajo nuestro plan, aquellos que cumplan con los requisitos de educación y trabajo y muestren buen carácter moral podrán convertirse en ciudadanos estadounidenses con plenos derechos”, señaló.

Dos. Garantizar la seguridad completa a las fronteras… con todo y construción del muro fronterizo con México, incluida. Fundamentalmente, nuestro plan cierra las terribles lagunas explotadas por criminales y terroristas para ingresar a nuestro país y finalmente pone fin a la práctica peligrosa de capturar y liberar”

Tres. Terminar con el otorgamiento de greencards por el sistema conocido como “Lotería de Visas” y que ahora se ofrezcan con base “en méritos” y…

Cuatro. Poner alto a lo que él llama “migración en cadena”; es decir, que los inmigrantes que consigan su naturalización no puedan solicitar residencia permanente para sus padres o hijos mayores de edad. “Bajo nuestro plan nos enfocamos en la familia inmediata al limitar los patrocinios a los cónyuges e hijos menores de edad”.

Sin mencionar las balaceras que han armado ciudadanos estadounidenses gracias a la libertad para conseguir armas, Trump recordó que “ataques terroristas” fueron perpetrados  por personas que llegaron a Estados Unidos gracias a la lotería de visas. “Es hora de reformar estas obsoletas regulaciones de inmigración y finalmente llevar nuestro sistema de inmigración al siglo XXI”.

Y como si estuviera ante el “Honorable Congreso de la Unión” de México, Trump adornó su presentación con datos apantalladores, los cuales -según señala Univision- no corresponde con la realidad. Por ejemplo, presumió que durante su año de administración se han conseguido crear 2.4 millones de empleos. Wow… eso ni Underwood con “America Works”. Sin embargo, la verdad es que de esa impresionante cifra sólo se han concretizado 200 mil. Además, presumió el crecimiento de la industria automotriz, asegurando que Chrysler está mudando su planta de México para Estados Unidos… algo exagerado, ya que la empresa sólo moverá para Michigan la planta productora de camionetas Ram. El resto, queda en suelo nacional.

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