El día de hoy Trump madrugó para lanzar una serie de tuits en los que acusa a su antecesor, Barack Obama, de intervenir sus oficinas en la Torre Trump durante el proceso de las elecciones. Esta nueva verborrea se hizo sin presentar pruebas que respalden las acusaciones.
Terrible! Just found out that Obama had my “wires tapped” in Trump Tower just before the victory. Nothing found. This is McCarthyism!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) March 4, 2017
“¡Terrible! Me acabo de enterar que Obama intervino mis teléfonos en la Torre Trump justo antes de la victoria. No encontró nada. ¡Esto es macartismo!”
How low has President Obama gone to tapp my phones during the very sacred election process. This is Nixon/Watergate. Bad (or sick) guy!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) March 4, 2017
“Qué bajo ha caído el presidente Obama para intervenir mis teléfonos durante el sagrado proceso de elecciones. Esto es Nixon/Watergate. ¡Hombre malo (o enfermo)!”
Trump menciona a Nixon, McCarthy y al Watergate, haciendo referencia al abuso de poder contra rivales políticos y a la persecución al estilo de la inquisición por su ideología. Así Trump se pone en el papel de víctima.
Obama no respondió directamente pero, de acuerdo al New York Times, el portavoz de Obama, Kevin Lewis, negó las acusaciones del actual presidente estadounidense. Enfatizó que “una regla fundamental de la administración de Obama fue que ningún oficial de la Casa Blanca intervino jamás con ninguna investigación independiente llevada a cabo por el Departamento de Justicia. Como parte de esa práctica, ni el presidente Obama ni ningún oficial de la Casa Blanca ordenó jamás la vigilancia de algún ciudadano estadounidense. Cualquier insinuación al respecto es simplemente falsa”.
Hasta el momento, el ataque de Trump no tiene ni precedentes ni pruebas. Así que por ahora todo queda en especulaciones y teorías de conspiración…