El instituto Electoral de Tlaxcala ha declarado como fuera de control los conflictos postelectorales que se dieron hoy en la entidad mientras se computaban los votos en los consejos municipales y distritales para validar la elección del pasado domingo.
Debido a la gravedad de los conflictos, el Consejo General del Instituto Electoral de Tlaxcala pidió apoyo de las fuerzas federales, luego de que las autoridades locales se hubieran visto rebasadas por el ajetreo de los militantes y los simpatizantes de los partidos políticos.
La presidenta de ese órgano, Orta Guillén, dijo:
«La situación es preocupante en el Estado, nunca se había dado una situación similar en un proceso electoral»
Los conflictos con los simpatizantes y militantes comenzaron con el cómputo de los votos y fue creciendo hasta que se empezaron a meter con los funcionarios electorales, con los ciudadanos que participaban con el conteo, y llegaron a las agresiones físicas y a quemar boletas electorales.
Los puntos donde los conflictos son más fuertes son en los municipios de Tetlatlahuca, Nanacamilpa, Huactzinco, Tlaltelulco, Xaloztoc, Apizaco, Calpulalpan, Tepetitla, Ixtacuixtla, Teolocholco, Huamantla, San Pablo del Monte, Tocatlán, Acuamanala y Panotla.
Guillén hizo un enérgico llamado para que los partidos políticos solicitaran a sus simpatizantes y militantes que mantengan la calma y acepten los resultados de la elección (recordemos que el Sistema que hacía el cómputo rápido del Instituto Electoral de Tlaxcala se cayó el día de las elecciones y siguió así durante el tiempo en que se iban calculando los PREP en las demás entidades de nuestro país).
La funcionaria recordó que el resguardo de la seguridad pública y la paz social no es responsabilidad total del Instituto Electoral de Tlaxcala, así que pide ayuda a las fuerzas públicas.
De no recibir la ayuda solicitada se tomará la medida de detener el cómputo y resguardar los paquetes electorales, así como a los funcionarios de los consejos hasta que las autoridades garanticen la estabilidad social.