El crimen y la inseguridad están canijas en el país. Parece ser que ya nadie está a salvo. Ni siquiera los mismos policías. Y para muestra un botón: el pasado 17 de mayo tres hombres asaltaron un camión de la Gendarmería Nacional en la Autopista del Sol. En el vehículo viajaban 29 elementos de esa división de la Policía Federal y un chofer, reporta el portal Animal Político. Los gendarmes se dirigían a la Ciudad de México, pero su conductor hizo una parada —“sin autorización”— para hacer del baño. La primera parada la realizó a la altura de caseta de cobro de Alpuyeca, Morelos. El conductor de la unidad volvió a hacer otro alto a los pocos metros bajo el argumento de que el camión “tenía una fuga de aire en una de las mangueras”. En ese momento subieron tres sujetos, de acuerdo con el testimonio de los gendarmes, con armas de fuego cortas. “Empezaron a insultarnos refiriendo que era un asalto”, relató la Gendarmería en un reporte.

El asalto duró cinco minutos. Durante el atraco, acusaron los gendarmes, se les quitaron pertenencias personales como celulares, dinero, anillos, carteras, relojes y mochilas. De acuerdo con la versión de la Gendarmería, sus elementos decidieron seguir su camino hacia la Ciudad de México, como estaba previsto originalmente, y en la capital reportaron el crimen del cual habían sido víctimas. La Gendarmería Nacional fue entró en acción en agosto de 2014 con el propósito de realizar diversas tareas de seguridad pública. El grupo con instrucción militar recibió un presupuesto inicial de mil 500 millones de pesos en 2013 —de acuerdo con el Centro de Análisis e Investigación Fundar—, mientras que en el año siguiente obtuvo 4 mil 500 millones de pesos. La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó que la gestión de la Gendarmería durante 2014 fue “deficiente“.

La división de la Policía Federal creada para “fortalecer el control territorial en los municipios con mayor debilidad institucional”, de acuerdo con el presidente Enrique Peña Nieto, fue señalada por la ASF por adquirir bienes que fueron distribuidos a otras divisiones de la policía, no reportar casi mil millones de pesos del rubro de Adeudos de Ejercicios Fiscales Anteriores (Adefas) y autorizar el ingreso de 247 servidores a la Gendarmería, aun sin que estos contaran con documentación que acreditara su formación militar. En 2017, la Auditoría le volvió a hacer señalamientos a la policía creada por el presidente Peña Nieto. Después de analizar la Cuenta Pública 2015, el organismo concluyó que la Gendarmería Nacional no ha ayudado a disminuir delitos en los lugares donde ha realizado operativos. Según la ASF, a dos años de la creación de esta división, el desarrollo y diseño de sus operativos son “deficientes”.

Gendarmería Nacional
Foto: Notimex

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