Para que enfrente las acusaciones por supuestos abusos sexuales cometidos contra menores, el Papa Francisco otorgó una excedencia al cardenal encargado de las finanzas del Vaticano, George Pell.  Según medios internacionales, el prelado es solicitado en Australia, donde se le señala como responsable de múltiples casos de pederastia.

El cardenal se convierte en uno de los funcionarios de la sede papal de más alto nivel en enfrentar cargos criminales relacionados con abusos sexuales… al menos de los últimos años. Como bien apunta The New York Times, este caso pone a prueba la credibilidad del Papa Francisco, con quien -supuestamente- se busca borrar la mala imagen que sacerdotes con las mismas mañas que Pell han dado a la iglesia alrededor del mundo.

Las acusaciones contra el encargado de las finanzas del vaticano llegaron desde Australia, donde se le acusa de incidentes “del pasado”, señaló la comisario adjunta de la policía del Estado de Victoria, Shane Patton, quien se limitó a revelar que más de una persona ha presentado cargos en contra de Pell. “Múltiples casos”, apuntan medios internacionales.

Según la BBC, el cardenal es sospechoso de abusar sexualmente de menores en la época en que se desempeñaba como sacerdote en la ciudad de Ballarat, esto desde la segunda mitad de la década de los 70 hasta inicios de los 80. Lo mismo cuando fue arzobispo de Melbourne (de 1996 a 2001), ambas ciudades ubicadas en Victoria.

¿Qué tan “pesado” es Pell dentro de la iglesia católica? Bastante. Además de administrar las limosnitas que la gente da cuando Francisco ofrece su misa (es un decir, seguramente le echa ojo a millones de euros diariamente) el australiano de 76 años fue -en su momento- considerado para ocupar el puesto que dejó Benedicto XVI. Es decir, hubo la posibilidad de que el máximo representante de la iglesia católica fuera un (supuesto) pederasta.

Por el cargo que ocupaba, George Pell era la tercera persona más poderosa en El Vaticano. Así de relevante es que las autoridades en Australia se hayan aventado el tiro de presentar cargos en su contra.

En comunicado, la Santa Sede señaló que recibió con desagrado las imputaciones en contra de Pell, quien durante años se ha condenado los casos de abusos sexuales cometidos por sacerdotes. Incluso, remarcó, fue él quien apoyó la creación de la Comisión Pontificia para la Tutela de los Menores; además que como Obispo diocesano de Australia, introdujo sistemas y procedimientos para la protección de los menores y para garantizar la asistencia de las víctimas de abusos. Parece que para El Vaticano alguien con los antecedentes de Pell no es capaz de ser un pederasta.

Al parecer no se trata de meras acusaciones: Pell fue retirado de su cargo, ya que las acusaciones en su contra han sido investigadas desde 2012 por las autoridades australianas… aunque para él se tratan de “difamaciones”.

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