Aunque muchos estaban mordiéndose las uñas diciéndose “¡Qué pin%&/es nervios!, ¿qué irán a decir en la Cumbre de Lima?”, pues resulta que no. Hasta por ahí del mes de la madre sabremos cómo nos dan en la ídem con el Tratado de Libre Comercio (TLC).
Lo anterior fue señalado – en otras palabras – por el titular de la secretaría de Economía, Ildefonso Guajardo. Según el único vato que sigue chambeando en el gabinete de EPN, no se ha avanzado lo suficiente en las renegociaciones como para llegar a la Cumbre de las Américas (a celebrarse en Lima el 13 y 14 de abril) y dar un anuncio respecto al futuro del acuerdo comercial… así que, pese a que por la tierra de El Chorrillano Palacios van a andar Justin Trudeau, Enrique Peña Nieto y Donald Trump, no habrá posicionamiento, según comentaron para La Jornada fuentes que prefirieron guardar el anonimato.
¿Tons, pa’ cuándo? Pues el buen Poncho Guajardo asegura que por ahí de la primera semana de mayo será posible saber si se cierra (o no) el TLC, esto debido a que si Estados Unidos sigue haciéndose el remilgoso todavía en ese mes, pues más tarde no podría llevar el acuerdo a voto por el actual Congreso. Pero con todo y las últimas militarizadas decisiones de Trump, hay una probabilidad del 80% de que se consiga un acuerdo sobre la renegociación del Tratado.
En la misma sintonía que las fuentes de La Jornada, Guajardo descartó que durante la Cumbre de las Américas pueda hacerse un pronunciamiento por parte de los mandatarios de México, Estados Unidos y Canadá, debido a que – por ahora – no existen condiciones para ello. ¿Y por qué su optimismo… en sólo unas semanas se puede avanzar? Pues al parecer, así es. De hecho, en el diario capitalino se señala que, a pesar de que hace unos cuantos días se reunieron, Ildefonso Guajardo, y la ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, celebrarán un nuevo encuentro a finales de esta semana.
¿Y el representante de Estados Unidos? Ahh pues el buen Robert Lighthizer, no asistirá… sin embargo, esto no quiere decir que tiene pensado ponerse pesado. Por el contrario, ha presionado para que se llegue a un cuerdo y, por su parte, el pasado jueves Trump comentó que se ha trabajado muy duro… todo para tener algo “bastante pronto”. ¿Y ahora por qué tanta urgencia? No es de a gratis, uno de los principales motivos es el conflicto arancelario que Estados Unidos se carga con China y su necesidad de tener un acuerdo comercial antes de que termine el periodo del actual Congreso.
