Y hoy, en la gustada sección “Soluciones brgs”… luego de ser blanco de críticas por aumentar su sueldo 144% en sólo dos años, la sacrosanta suegra del Bronco, Teresa Martínez Galván, decidió… ¿reducir su inexplicable sueldo?, ¿dejarse investigar?, esteeeemmm no, pero casi: jubilarse.
Eso sí… la doña se hace a un lado de la administración del Bronco, no sin antes dejarse beneficiar por última vez. Y es que la señora se irá a descansar con una pensión del 59% de su último salario… una cifra muy contrastante en comparación con el dinero con el que se retiran otros trabajadores, que nomás reciben entre el 5 y 10% de su último sueldo.
De acuerdo con Reforma, la noticia de la jubilación de la suegra del Bronco no fue dada a conocer con la formalidad requerida. La señito se fue sin hacer mucho ruido y sólo nos enteramos de que ya no chambea porque la organización Redes Quinto Poder hizo una solicitud (vía Transparencia) para saber bajo cuál justificación Teresa Galván había incrementado su salario de forma tan superlativa en sólo dos añitos.
La organización también quería saber quién autorizó los incrementos en el salario de la funcionaria, así como conocer de dónde salían los recursos para pagar las mensualidades de la susodicha. En respuesta, la Secretaría de Administración estatal informó que la suegra del gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, ya no es empleada de la Secretaría de Seguridad del Estado y, ahora, está en calidad de jubilada.
Hace unos días, se dio a conocer que la suegra de Rodríguez Calderón ganaba un sueldo mensual de más de 70 mil pesos… cuando en 2017 “apenas” si recibía 28 mil 789 pesos. El aumento de sueldo más significativo al que la mujer se hizo “merecedora” fue en 2018, cuando el monto de su pago subió hasta los 67 mil pesos al mes… luego se fue de permiso, porque quería ver qué se siente perder una elección (fue candidata a la alcaldía de Santa Catarina) y regresó para encontrarse que su ausencia fue recompensada con un sueldo de 70 mil 236 pesos… por cierto, doña Tere nunca cambió de puesto…
Y nunca nadie se enteró qué es lo que hacía la señora en la Secretaría de Seguridad de Nuevo León. Testimonios recogidos por diversos medios, coincidieron: “nadie sabe qué trabajo ejerce”. Pero bueno, lo que ahora sabemos es que la doña ya descansa en casita.