Su participación en la Guerra Civil Española y su clara ideología que rechazaba el totalitarismo fueron dos de los aspectos que permearon de manera notable la obra del periodista y escritor británico George Orwell, quien entregó varias obras que dejaron marca en la literatura del siglo XX como Rebelión en la granja y 1984.
Fue en esta última obra donde su creatividad y visión lograron imaginar un futuro distópico en donde la sociedad estaba constantemente vigilada por la figura omnipresente del “Gran Hermano”, centro nervioso de un régimen totalitario aplastante cuya eficacia estaba sostenida por la Policía del Pensamiento, los Ministerios de la Verdad, la Paz, el Amor y la Abundancia y una serie de inventos tecnológicos que facilitaban los objetivos de estas dependencias.
1984 fue publicada en 1949 y es sorprendente como muchos de los avances tecnológicos que Orwell imaginó en este entonces hoy en día ya son una realidad. Aquí te compartimos una lista de las ideas del escritor británico que se materializaron:
Dispositivos para ver a través de los muros
La vigilancia del Gran Hermano era tan férrea que incluso sus cámaras podían ver a través de los muros. Actualmente el MIT está trabajando en un dispositivo que con la ayuda de las ondas de Wi-Fi permitirá detectar si existe presencia humana en una habitación sin tener la necesidad de entrar a ella.
Pantallas
Hoy en día estos artefactos son tan comunes en nuestra vida diaria que incluso llegan a pasar desapercibidos, pero para el tiempo en que Orwell las imaginó eran una realidad casi imposible y fantasiosa. Actualmente las vemos en todos lados: en nuestras casas, en anuncios publicitarios en las calles, en las tiendas y ahora mismo estamos viendo a una.
Gran parte del día nuestros ojos están posados sobre alguna pantalla y éstas cada vez están adquiriendo más capacidades y un ejemplo de ello es el Kinect de Xbox, el cual a través de un sensor ya puede reconocer nuestras expresiones faciales o los sonidos que emitimos. Es decir las pantallas ya pueden vernos y escucharnos, tal como sucedía en 1984.
Si quieren adentrarse un poco más en la reflexión sobre el papel de las pantallas y las videocámaras de seguridad que nos vigilan día a día, les recomendamos ver Red Road, película de la directora británica Andrea Arnold
Procesamiento del lenguaje natural
Aunque se escucha como algo muy complejo, de seguro alguien de ustedes ha hablado con Siri en su smartphone ¿o no? A eso se refiere este concepto, a la capacidad de las máquinas de descifrar, entender y procesar en acciones el lenguaje humano. Y eso lo predijo de alguna manera Orwell, cuyo personaje principal de su obra maestra (el empleado del Ministerio de la Verdad, Winston Smith) re-escribe la historia oficial a través de un micrófono que transforma sus palabras en letras.
Implantar falsos recuerdos
Así es, recientemente investigadores del MIT lograron implantar memorias en un par de ratones de manera efímera. Y mucho del miedo del Orwell recaía en la posibilidad de crecer con una historia repleta de memorias falsas y construidas a conveniencia del poder hegemónico. ¿Qué pasaría si se pudiera implantar memorias permanentes en el cerebro humano?
PRISM
Cuando en el 2013 Edward Snowden filtró a través de The Guardian y The Washington Post varios documentos clasificados como Top Secret en los cuales salían a la luz los programas de espionaje masivo implementados por el gobierno de Estados Unidos, el mundo se dio cuenta del alcance que tenía PRISM, cuyas manos y ojos se extienden a ciudadanos y figuras públicas localizadas fuera de las fronteras de la nación de las barras y las estrellas.
Una copia del sistema utilizado por el Gran Hermano en 1984 quien podía monitorear cualquier actividad de las personas que tenía al alcance de su larguísima sombra.
Via Cooking Ideas