Imagina una criatura marina de forma cilíndrica de hasta 30 metros, de estructura hueca y traslúcida, que a su vez se conforma de otros pequeños seres. Cualquiera de nosotros pensaría que esta descripción corresponde a la de un ser de ciencia ficción y no a un animal real.
Para nuestra sorpresa, estas criaturas existen. Se les conoce como Pirosoma y es tan rara que está conformada por seres diminutos llamados zooids, los cuales tiran agua a través de unos tubos, se alimentan de plancton y después empujan el agua filtrada de regreso.
Cada zooide es de pocos milímetros de tamaño. Entre ellos están conectados por un tejido, por lo que juntos se mueven como una sola estructura tubular que en un extremo termina en punta, mientras que el otro es tan ancho que puede medir hasta dos metros.
“Son gigantes, aterradores y esperan atascarte en alguno de sus extremos cuando pasas cerca. Por suerte, además de ser lentos, también son delicados y suaves”, dijo Rebecca Helm del Deep Sea News al aclarar que estas criaturas no son tan peligrosas como parecen.
Un Pirsoma es tan extraño que algunos lo denominan como “unicornio de mar”. Está clasificada como una especie pelágica, osea, es de nado libre. Rara vez es vista pues vive en aguas abiertas.
Hace un par de años, un grupo de buzos lograron captar a una de estas criaturas en las costas de Tasmania:
Parece un condón gigante. Las imágenes fueron tomadas por Michael Baron de Eaglehawk Dive Centre.
¿Cuántos misterios más guardarán las profundidades del mar?
