Este jueves, 24 de mayo, las cosas no amanecieron muy tranquilas en el sureste asiático. La policía tailandesa cayó con más de cien elementos en un grupo de redadas a cuatro de los más importantes templos budistas del país. Entre los arrestados hay decenas de monjes, líderes de la congregación budista y también agarraron hasta los que estaban orando por ahí. Las operaciones de seguridad fueron planeadas para hacer una ‘limpieza’ en la comunidad religiosa, porque llevan varios escandalazos en los últimos meses.
Tailandia, actualmente vive bajo el régimen de una junta militar —que no se caracteriza por sus grandísimas libertades— y han intentado reformar el Budismo para mejorar su imagen pública. Los monjes budistas son muy respetados en el país asiático, y por eso, era muy difícil tomar acciones policiacas contra ellos. Según Reuters, es considerado “taboo” siquiera amenazar con arrestar a un monje.
Además del respeto que se habían ganado; de los casi 70 millones de tailandeses, más del 90 por ciento practica la religión budista. Sin embargo, con los últimos escándalos que se han hecho públicos no hay ni cómo defenderlos. Karma, le dicen.
Thailand arrests senior monks in temple raids to clean up Buddhism https://t.co/bMzJ9GTHl2 pic.twitter.com/9AsHUCHDb2
— Reuters Top News (@Reuters) 24 de mayo de 2018
Para que se den un idea, nada más en los últimos meses, las más grandes autoridades budistas han sido acusadas de lavado de dinero, desviación de recursos, robo, falsificación, detenciones ilegales, asesinatos y —como nunca puede faltar— una buena dosis de escándalos sexuales.
En una entrevista con Reuters, el oficial de la agencia de investigación de Tailandia, Thitiraj Nhongharnpitak dijo —después de pasar 15 minutos deletreando su nombre—, que esto “solo es la etapa de investigación”; o sea, que se agarren porque van empezando.
Entre los arrestados esta Phra Phrom Dilok, un miembro del Consejo Supremo Sangha, el órgano rector de la religión budista en Tailandia. Dilok, es un monje de 72 años, que está bajo fuertes investigaciones por volarse las millonarias donaciones que recibían los templos.
For Theravada monks in Thailand, orange was always the new black: A galleryhttps://t.co/2sv8krWnc7 pic.twitter.com/QvghdER1YY
— Amanda Florian (@Amanda_Florian) 23 de mayo de 2018