A pesar de la enorme desventaja de haber muerto en 2011, nuestro amigo Steve Jobs ha seguido patentando cosas, muchas cosas. 141 cosas.
Algunos de las cosas que logró patentar después de muerto son el diseño del cubo de cristal afuera de la Apple Store en Manhattan, ¿cómo lo hizo?
Desgraciadamente la respuesta es menos sobrenatural de lo que nos hubiera gustado, se debe a una sencilla razón.
Apple es muy agresivo en cuanto a sus patentes, pues registran hasta las más mínimas ideas que tienen, además el nombre de Steve Jobs aparece en todo lo que él haya participado por más mínima que haya sido su intervención.
El número seguirá creciendo, sin duda.
Vía Newser