¿Se acuerdan del sonado caso de hace unos días que tuvo lugar en un Starbucks de Filadelfia en el que dos clientes afroamericanos fueron detenidos arbitrariamente por la policía por estar esperando a un amigo? ¿El pecado de estos dos chicos? No haber ordenado nada…

Pues esto tuvo consecuencias, y tras el impacto mediático y presión social que tuvo este caso, Starbucks anunció que cerrará durante algunas horas sus 8.000 establecimientos en Estados Unidos, el próximo 29 de mayo, para darles unas clasecitas a sus empleados acerca del trato a clientes sin discriminación racial. ¿Es necesario? SÍ. ¿Debería serlo? NO. Es como… ¿por qué unos empleados decidieron que un par de personas que ni la deben ni la temen, deberían ser arrestados? ¿Por su color de piel? Wow, ¿qué tipo de 1960 es este?

Estos clientes no hicieron nada incorrecto, ni se robaron el WIFI vaya… pero el gerente del establecimiento llamó a la policía porque ‘no estaban consumiendo’. Ellos le dijeron al empleado que estaban ahí esperando a una persona, y cuando esta persona apareció, nadie les hizo caso, NADIE. Acto siguiente: los tuvieron encerrados durante seis horas y luego un juez los liberó porque ‘no habían cometido ningún delito’… No way…

Esta iniciativa afectará a unos 175.000 empleados, pero alguien que tendrá que buscar otro lugar para tomar esta clase de ‘no al racismo’ será el gerente de esta cadena en Filadelfia, porque como dijera Trump: ‘HE’S SOO FIRED!‘ (Perdón por citar a ese ser de oscuridad).

¿En México deberían cerrar todos los tianguis para darles una lección a los comerciantes y que aprendan que no todas las mujeres son ‘güeritas’?

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