Después de un vuelo lleno de turbulencias en donde pensamos que moriríamos, esta tarde de sábado llegamos a la ciudad de Guadalajara para ser partícipes de la Feria Internacional del libro 2012.
Y Guadalajara nos recibió generosa, con sus mujeres de ojazos tapatíos, su bello centro histórico, sus tortas ahogadas, su tequila, sus Chivas y claro, su prodigiosa Feria Internacional del Libro, una de las más importantes del mundo.
Venimos a reportar lo que ocurre en la FIL, manteniendo el mismo compromiso que tenemos con nuestros lectores cuando cubrimos un festival de música, cine u algún otro acontecimiento relevante: hacer que todos vivan la experiencia de estar en una Feria del Libro con tanta importancia y tradición. Y es que la cultura, y en este caso, la literatura, para nada es un tema aburrido.
Basta haber sido seducido alguna vez por un buen libro para que este evento se nos antoje imperdible. Ver de cerca a esos escritores cuyas letras nos han hecho viajar a los lugares más lejanos, estar en las presentaciones de los nuevos títulos que seguramente llenarán los estantes de las librerías durante los próximos meses, intercambiar impresiones con otros locos que también ven en los libros una maravillosa oportunidad de ampliar los propios horizontes. A una Feria del Libro como esta se viene a perderse entre millones de obras, mientras esperamos el milagro de encontrar la próxima historia que capture nuestro entendimiento.
En mi caso, ignoro en qué momento caí preso de esta dulce adicción que es la lectura. Supongo que todo comenzó cuando empecé a leer fascinado el “Capulinita”, un pequeño cuentito que narraba las aventuras del personaje interpretado por Gaspar Henaine. Años después, me dio por devorar cómics. Superman, Los Hombres X, Batman o Spiderman, daba igual quién fuera el súper héroe, lo importante era vivir más vidas, estar ante la perspectiva de ser otra persona y vivir aventuras inimaginables sin necesidad de salir de mi cuarto.
Un salto aun mayor se dio cuando una profesora de la prepa nos habló con pasión de la “La Divina Comedia”, novela de Dante Alighieri. La leí fascinado, en cuestión de días aquella formidable historia sobre un hombre que recorre los infiernos buscando a su Beatriz me cautivó. Desde ese momento no he dejado de leer y de adoptar ídolos que no son actores ni músicos famosos, sino escritores.
Kundera, García Márquez, Murakami, Fuentes, Hesse, Rulfo, Cortazar, o Kafka, por citar una injusta minoría, son algunos de los constructores de esos universos en los que he habitado. Un mundo construido en hojas de papel, y que me resulta mucho más vasto y coherente que el real.
En Sopitas.com, además de traerte notas divertidas, también nos hemos preocupado por ofrecerte algo más. Además de las encueraditas, los goles de los partidos y las regadas de nuestros políticos, existen otros acontecimientos que también son noticia. En este caso, la FIL nos da el pretexto ideal para hablar de literatura, esa bendita aliada que hace nuestro entorno más habitable.
Iniciamos así nuestra cobertura de la FIL Guadalajara, la fiesta literaria más grande e importante de habla hispana. Esperamos lograr transmitirles la pasión por la literatura que se respira en cada rincón de esta fiesta. No se aparten, esto se pondrá bueno.
Y sí tienen oportunidad, no dejen de venir. La FIL de Guadalajara se lleva a cabo desde hoy y hasta el 2 de diciembre en las instalaciones de Expo Guadalajara. Acá está el programa de actividades, por si lo quieren consultar.