En uno de los capítulos de la nueva temporada de The Black Mirror, el gobierno de Arabia Saudita le concede la ciudadanía a una humanoide creada con el objetivo de ofrecer ayuda a los adultos mayores que visitan los parques nacionales. Como es de esperarse, uno de los cabecitas blancas termina completamente enamorado de “Sophie” (como la empresa creadora, Hanson Robotics, decidió bautizarla) y de ahí se desencadenan dilemas tecnológicos, morales y futuristas que tanto gustan a los amantes de la serie inglesa… Ahh… pero no. No es ficción, ocurrió en verdad.
Así es, luego de hacerle las modificaciones adecuadas (recordemos que la jocosa robot el año pasado señaló que destruiría a los humanos), “Sophie” recibió la ciudadanía por parte del gobierno de Arabia Saudita. Esto se dio durante una entrevista realizada por el periodista de la CNBC, Andrew Ross Sorkin, CNBC en el marco de una conferencia para inversores.
“Me siento muy honrada y orgullosa de esta distinción única. Es histórico ser el primer robot en el mundo en ser reconocido con una ciudadanía”, señaló la humanoide, durante la entrevista, en la que dio muestra de su capacidad para expresar facialmente su estado de “ánimo”, además poseer una capacidad de razonamiento que ya quisieran muchos. Por ejemplo, al cuestionársele el miedo que algunas personas podrían tener de robots como ella… no sé, después de ver Blade Runner, “Sophie” se limitó a contestas: “Ahhh, Hollywood…again (…) no te preocupes: si eres bueno conmigo, yo seré bueno contigo”.
La noticia no cayó del todo bien en parte de los saudíes, quienes además de no estar muy de acuerdo en compartir ciudadanía con una robot, criticaron que su paisana no portaba la abaya ni estaba acompañada de un tutor masculino, dos actos ilegales para uno mujer del país del que ahora es integrante. Como sea, el otorgarle la ciudadanía a “Sophie” no es por otra cosa que hacer que Arabia Saudí parezca un país renovado y tecnológico.