No es algo nuevo que el gobierno norteamericano torture a sus prisioneros o los objetivos de sus pretendidas invasiones. Hace unos días se dio a conocer un nuevo informe por parte del Comité Selecto de Inteligencia del Senado norteamericano, en el cual se relevaron algunas de las terroríficas tácticas de persuasión usadas por la CIA.
Entre los horrores que han vivido principalmente los prisioneros que se encuentran en la infame cárcel de Guantanamo, destacan la privación del sueño hasta por una semana con amenazas de que sus hijos o madres serían asesinados. En otros casos y con la ayuda de médicos, se le dio a los prisioneros “alimentación rectal” en los que se les introdujeron nueces, pasas y otros alimentos por el ano. También el informe cuenta sobre acciones como el ahogamiento simulado o ser obligados a mantenerse de pie durante horas aún cuando tenían las piernas fracturadas.
Una más de las horrendas torturas cometidas por la CIA incluye el aislamiento en celdas en completa oscuridad en las cuales había aparatos de sonido a volumen altísimo durante más de 30 horas. En el informe se incluye una lista de canciones que los mandos de la CIA utilizaban para este fin.
En la lista figuran temas como “We Are the Champions” de Queen, “The Real Slim Shady” de Eminem, “Take Your Best Shot” del grupo Dope, “Dirrty” de Christina Aguilera, “Babylon” de David Grey, música arábiga en pleno Ramadán que para los prisioneros musulmanes representa un pecado. Metallica, Neil Diamond, Don McLean, los Bee Gees, Deicide, Marilyn Manson y el tema del dinosaurio Barney, son varios de los artistas cuya música es utilizada con el objetivo de enloquecer y desesperar a los cautivos de la infame prisión cubana.
El objetivo de la tortura con música es privar al prisionero del “espacio interior”, de ese refugio done puede aislarse del dolor. El torturador antepone sus ideologías y expresiones culturales, así que el torturado no tiene dónde esconderse.
Este asunto primero llegó a oídos de Metallica quienes pidieron a la milicia que dejaran de usar sus temas pues “no quieren promover la violencia” (aunque bueno, tienen un álbum llamado Kill’em All). Y ahora los Skinny Puppy, prominente banda de música Industrial, han levantado la voz para evitar que su música sea utilizada como método de tortura.
Aún más, el grupo ha tomado la acción de demandar al gobierno norteamericano, específicamente al Departamento de Defensa por regalías no recibidas durante la ejecución de sus temas en la prisión. Skinny Puppy espera un pago pro exactamente 666 mil dólares por uso indebido que además viola las leyes de copyright a que está sujeta su música. El grupo se dijo muy ofendido por saber que su música es utilizada por el gobierno como arma para hacerle daño a otra persona.
Esta información le fue proporcionada a la banda por un guardia de la prisión quien además es fan de Skinny Puppy y les hizo saber que su música fue utilizada en torturas al menos en cuatro ocasiones. De igual manera se sabe que muchos guardias de la prisión han sufrido colapsos nerviosos por las mismas torturas que se inflingen y otros han mandado enérgicas protestas al Departamento de Defensa cuestionando la legalidad de los métodos utilizados en la prisión.
