Recientemente Hillary Clinton criticó las decisiones de política internacional que ha tomado el presidente de los Estados Unidos, sobre todo en relación al conflicto que actualmente sostiene en territorio iraquí… aunque las palabras de la ex secretaria de Estados medio le calaron a Obama, poca repercusión tuvieron y hasta vía telefónica ya hicieron las paces…
Pero uno de los hombres más poderosos –en política- seguramente está temblando ahora que el hombre más poderoso –en todo sentido- ha decidido derramar su sabiduría y hablar sobre la forma en que se conduce a su país. Obviamente nos referimos al maestro Chuck Norris.
“En 2008 los estadounidenses designaron a un presidente que pensaban que uniría el país (…) restauraría la economía de EE.UU. y mejoraría las relaciones en el mundo. Pero una vez pasada la mitad de su segundo mandato los estadounidenses están más polarizados (…) y el país tiene una posición en el mundo más inestable que nunca; Irak es solo un síntoma de un problema más grande”.
Lo anterior fue dicho por Norris, quien no es presidente porque no quiere y porque en el tiempo que no ocupa en ponerse más mamey, ser campeón mundial de karate, estudiar tácticas militares, actuar y mantener cierto equilibrio en el universo, escribe en una columna para NewsBusters.com, medio donde firmó un texto titulado “Cómo el liderazgo de Obama estropeó América”... parte 2.
Con toda la autoridad que le da el haber peleado de “tú a tú” con Bruce Lee, Norris señala que Obama “no ha tenido la habilidad ni el carácter para liderar en tiempo de crisis a la gente que se opone a él y a sus ideas”, hecho que salta a la vista para cualquiera que no sea un letrado y competente analista político como lo es él.
Aunque reconoce que el presidente estadounidense es carismático, criticó que sus partidarios confundieran eso con su capacidad para liderar un país: “Muy pocos políticos en la historia vacilaron tanto como él en asuntos críticos: Irak, Irán, los derechos de los gays, abortos, religión, control de armas, etc.”
Repasando la carrera de Obama y señalando sus debilidades en el terreno de la política nacional, Norris remata calificando como “deprimente” el papel del presidente estadounidense en el plano internacional: “Sólo considere los últimos años y pregúntese si ha contribuido una sola onza con las fuerzas opuestas o en las crisis de Corea del Norte, Siria, Irán, Afganistán, Libia, Rusia, Ucrania, Gaza y ahora Irak de nuevo”.
Por todo lo anterior, Norris considera que Obama nunca logrará el nivel de personajes como Franklin D. Roosevelt, quien en épocas de crisis sacó a flote su liderazgo… palabra que el maestro Norris acuñó a base de puñetazos.