Hace apenas un par de días se discutía en la opinión pública muchos de los problemas de la encuesta de Morena para escoger al candidato o candidata para Jefe de Gobierno de la Ciudad de México. En general, no se sabía a ciencia cierta cómo sería el proceso y las implicaciones del mismo, sobre todo por las sospechas que se habían levantado por el posible casi obligado involucramiento de Andrés Manuel López Obrador. La desinformación llegó a un punto tal que el manejo en medios de los precandidatos sólo abonaba más a la especulación.
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Y la revelación de la ganadora no fue muy diferente. Desde una o dos horas antes de que se anunciara oficialmente (hasta el momento en que se redacta esta nota no ha pasado), medios de comunicación empezaron a trascender filtraciones que indicaban que Claudia Sheinbaum será la candidata de Morena a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México.
Esas filtraciones, cabe destacar, fueron confirmadas poco después (pero antes de que hubiera un anuncio oficial, eso sí) por los otros precandidatos, el mismo jueves 24 de agosto.
Por ejemplo, Mario Delgado dijo ante prensa que Sheinbaum había sido la ganadora.
🔴#ÚLTIMAHORA:
Claudia Sheinbaum ganó encuesta de Morena, revela @mario_delgado1. https://t.co/HgYzQHjNvi pic.twitter.com/Rp07reYePu— POLÍTICO México (@politicomx) August 25, 2017
De igual manera, Martí Batres tuiteó los resultados.
De todo esto valdrá la pena pensar un poco sobre lo que implica que el proceso de selección y revelación de la candidata haya sido, por decir lo menos, descuidado.