Jornadas de hasta 18 horas de trabajo, bajos salarios y multas por “arruinar” una prenda son el pan de cada día en un par de fábricas chinas que subcontratan a cientos de personas para producir la ropa que vende Shein. Eso es lo que encontró la periodista Ιman Amrani (y la reportera encubierta ‘Mei)’ en un documental que está causando un buen de ruido en Europa.
Se trata de ‘Inside The Shein Machine: Untold’, una investigación publicada en Channel 4 y que en 45 minutotes explica cómo le hacen estas fábricas para llegar a sus metas, a costa de los derechos laborales de sus trabajadoras —sin olvidar de poner en contexto qué onda con esta marca de ropa.
Se infiltraron en Shein y descubrieron una cadena de explotación
Pa’ comenzar, el documental se basa en las condiciones de trabajo que se viven en las fábricas que subcontratan a personal para la producción de la ropa de Shein.
Es decir, no son como tal fábricas de esta empresa —cuyo dueño es Chris Xu, una de las personas más ricas de China, aunque poco se sabe de su perfil, trayectoria y del método de producción de Shein.
Es una especie de outsourcing que suele ser usado por las marcas de ropa —que al igual que Shein no tienen fábricas propias— para la producción de su merch.
Aún así, esta investigación logró infiltrarse en las fábricas chinas encontrando a las trabajadoras en condiciones laborales deplorables.
El País, por ejemplo, retomó esta escena: un grupo de mujeres lavándose el pelo durante el descanso —la hora de comida, pues— porque el horario laboral no les daba chance de hacerlo en su tiempo libre.
Es decir, que el trabajo consumía hasta lo que tendría que ser su tiempo libre —todo sea por ganar dinero para poder sobrevivir.
¿De cuántas horas hablamos? Según esto, las trabajadoras llegan a cumplir hasta 18 horas.
Y, ¿cuánto les pagan? El salario mensual está más o menos en 600 euros —algo así como 11 mil 790 pesos—, aunque hay casos en que se paga por ropa. Y si las trabajadoras llegan a cometer un error en la producción, son multadas con hasta dos tercios de su salario.
La respuesta de SHEIN
Una vez publicado este documental, Shein respondió que va a investigar qué onda con las dinámicas en estas fábricas.
En un breve comunicado enviado por sus oficinas globales —que transcribieron a sus oficinas locales en más de 150 países del mundo—, avisaron que comenzarían una investigación. “Estamos preocupados por las declaraciones presentadas por Channel 4, las cuales violarían el Código de Conducta acordado por todos los proveedores de SHEIN”, aseguró la empresa de origen chino.
AQUÍ les contamos la respuesta completa, pero básicamente comentaron que se acercaron a Channel 4 para conseguir más información sobre la fábrica en China que destapó estos horrores.
Sin embargo, los hechos ahí están. Sobre una de las empresas más exitosas en Occidente que, mediante su app, suele lanzar una buena cantidad de ropa, casi mil productos al día.
Ropa que es considerada como fácilmente desechable y cuyos diseños son, ¿copias? de otras marcas, nada más que un poco más barato.