Dinamarca es algo así como el país más aburrido del mundo, pero también uno de los más estables en cuanto a varo y democracia se refiere. Quizá ambas cosas estén relacionadas… como sea, todo parece indicar que los legisladores de aquel paraíso se cansaron del asunto, fumaron crack, se rieron durante horas y crearon a Voteman, un dude animado que aparece en el video de promoción del voto más raro de la historia.
Voteman es un tipo ponchado con pinta de macho mediterráneo. Mientras mantiene una orgía loca con morras objetivadas, recibe una llamada del parlamento para llevar a la banda a votar por su eurodiputado. Voteman se pone manos a la obra y lleva a todos los daneses a ejercer su derecho y obligación ciudadana. Ah sí, por cierto, los lleva a golpes. Muchos, muchos golpes. Les rompe el hocico entero para que voten. Nada mal para la más avanzada de las democracias europeas, ¿verdad?
Mientras este tipo va por ahí repartiendo madrazo y medio, la voz en off narra cómo Voteman no ejerció el voto en las elecciones pasadas, perdiendo la oportunidad de influir en muchas de las cuestiones más importantes del país (como la administración de la canela en sus roles). Desde entonces Voteman está comprometido con llevar a a todos a votar, cueste lo que cueste.
Este video fue mandado a hacer por el mismísimo parlamento danés y les pareció lo más cool del mundo. Por eso lo colgaron en su canal oficial de Youtube y lo movieron por donde pudieron para que todos los daneses se sintieran amenazados motivados a ser buenos ciudadanos.
Cuando se les bajó su viaje, los parlamentarios cacharon que lo que habían hecho era machista, violento, antidemocrático y muy, muy, muy estúpido… Por estos motivos, cuando el video había alcanzado unas 200 mil visitas, decidieron quitarlo.
El presidente del parlamento, Mogens Lykketoft afirmó que había tomado en cuenta los comentarios de los usuarios de Youtube, que afirmaron que el video era “mucho más grave y ofensivo de lo pretendía ser y que se refería a los jóvenes de forma condescendiente”. Reconoció que para algunos “era un humor obsceno pero aceptable que podría generar interés en las votaciones del 25 de mayo, que era lo que se intentaba”.
En fin. Así las cosas por allá. Los daneses tienen el Estado de bienestar más funcional del mundo, así que de vez en vez tienen chance de jugar a ser… extraños. Qué diablos.
