La falta de lluvias en el país es un problema… pero, por lo que dice Enrique Alfaro, en Jalisco es un problemón que requerirá, en breve, hacer la respectiva declaratoria de emergencia.
Luego de una reunión con miembros del equipo de Gestión Integral del Agua y de la Secretaría de Infraestructura y Obra Pública, el gobernador de Jalisco difundió un mensaje en el que señala que, con base en diagnósticos de especialistas en sequías e inundaciones del Estado, creen que el gobierno federal está cerca de emitir la declaratoria de emergencia por sequía.
“En el documento preliminar lo que se informa es que nuestro Estado en un 68% de su territorio tiene una sequía clasificada como severa. Vivimos una situación que no se había vivido, según el reporte del Gobierno Federal, en los últimos 10 años en Jalisco”.
Enrique Alfaro aclaró que el problema no tiene nada que ver con el funciona de algún sistema o con la capacidad de respuesta que pudiera tener su gobierno o el federal… ahora sí, no hay a quien echarle la culpa (cof, más que a la propia humanidad, cof), ya que el problema de sequía es de corte ambiental… y grave.
Para explicar lo difícil de la situación, el gober de Jalisco comenzó por señalar que la presa Calderón, una de las que abastecía a varias zonas del Estado… pos, ya fue: “Es un agua con la que ya no contamos. La presa Calderón se secó” y, debido a ello, se tuvieron que reorganizar los canales de abasto: lo que llega e Chapala y pozos profundos en el área metropolitana de Guadalajara.
Aunque será en los próximos días cuando se declare la emergencia por sequía, los estragos de la falta de agua ya se viven en Jalisco desde hace rato. Según contó Enrique Alfaro, ya ha habido situaciones de tensión con productores que aprovechaban el sistema de riego del canal de Atequiza, el cual tuvo que ser reconfigurado.
Para más o menos darnos una idea del problema, cuando todo el sistema de distribución trabajaba al 100%, explicó Alfaro, se abastecían 8 mil 400 litros por segundo; en los momentos más críticos se bajó hasta 7 mil 900 y, aunque están por alcanzarse los 8 mil, se tiene un déficit de 468 litros por segundo, el cual se espera cubrir cuando las temporadas de lluvias permitan recuperar la presa Calderón.
“Hay que entender esto, porque tenemos un déficit muy grande que no se va a resolver. No es asunto del gobierno, es simplemente entender que no hay agua y que necesitamos asumir un compromiso, como jaliscienses, para hacer un uso racional del agua”.